Capítulo 2

Eun-woo dejó su mirada fija en la televisión y extendió la mano hacia donde podría haber un plato. En el plato que agarró, había una variedad de colores vibrantes. Había zanahorias frescas, pepinos frescos, pimientos frescos y boniatos frescos, todos cortados en palitos del tamaño perfecto para comer y dispuestos de manera bonita, listos para ser degustados.

Eun-woo, cuyo sistema digestivo era más débil que el de los demás debido a su alergia a los huevos, se esforzó por encontrar una forma de hacer su vida más fácil, así que optó por las verduras. Las verduras al natural eran aburridas, así que salsa de sésamo, pasta de pimiento, kétchup y salsa tabasco las acompañaba.

Mientras masticaba las crujientes zanahorias, también disfrutaba de una mini cerveza. Incluso en circunstancias extremas, la personalidad positiva de Eun-woo brillaba. Su hermano, médico, le dijo que no tomara más de una lata de cerveza, por lo que había optado por la versión mini.

Evitando los bocadillos y aperitivos que contenían huevos, Eun-woo comenzó a comer frutas y verduras para mantenerse saludable. Los menús estaban compuestos por alimentos que solo podían mejorar su salud. Además, se había cansado de leer los ingredientes y aditivos alimentarios escritos en letra pequeña en la parte posterior de los paquetes de las golosinas que deseaba comer.

En la TV de 100 pulgadas que ocupaba una pared de la sala de estar, los robots estaban destruyendo y arrasando con la tierra. Estaban divididos entre el bien y el mal. Aunque los del lado bueno afirmaban estar salvando la tierra, parecía que los dos bandos se unían para destruirlo todo.

 

“Vaya. Va a costar una fortuna repararlo. Ni siquiera lo cubre el seguro”

 

Vistiendo su pijama amarillo recién lavado y usando la venda de personaje que habían comprado juntos como una banda para el cabello, Eun-woo cepilló su flequillo hacia atrás para que quedara limpio. Su rostro, que estaba en un desorden debido a una reacción alérgica, había mejorado bastante. Aunque sus labios aún estaban ligeramente hinchados en comparación con antes, habían mejorado mucho.

Una parte de él quería correr hacia Jae-min en cuanto decidió divorciarse, pero no podía porque tenía la cara hecha un desastre. Jae-min sería el primero en verlo cuando la reacción alérgica remitiera. Mientras se intensificaba la pelea de robots en la tele, Eun-woo se recostó en el cómodo sofá y extendió los brazos hacia adelante.

 

“¡Pégale! ¡Destroza todo! Oh, no lo hagas. ¿Por qué estás mirando cómo se transforman? ¡Destrúyelos antes de que se transformen!”

 

A pesar de los ánimos de Eun-woo, el robot que se suponía que protegía la tierra, que había esperado pacientemente a que su oponente cambiara, fue derrotado. Eun-woo chasqueó la lengua y se llevó a la boca la zanahoria que tenía en la mano. (¡Crunch, crunch!) El sonido de masticar bruscamente la crujiente zanahoria se perdió en el imponente sonido de la película.

Para Eun-woo, que vivía actuando a fondo, la noche era un momento de bendición. Su esposo estaba de viaje de negocios, Ju-won y la tía ayudante también se habían ido después del trabajo a las 7 de la tarde. A partir de entonces, su vida se desplegó. No había televisión en la habitación de Eun-woo, así que la sala se convirtió en su escondite. Su marido no regresaría de su viaje de negocios hasta mañana por la noche.

Así que debía disfrutar en grande de su última noche en soledad. Eun-woo subió el volumen de la televisión hasta que retumbara en el hogar. Con un televisor de pantalla grande y unos altavoces de alto rendimiento como esos, no había necesidad de ir al cine.

Al principio, los vegetales crudos que solían ser desagradables y de sabor extraño se volvieron agradables a medida que los comía.

Aunque se le prohibió beber alcohol mientras tomaba medicamentos para las alergias, Eun-woo lo vio como un premio de consolación por su depresión. Además, era la última noche que podría divertirse, así que se lo pensó mejor y compró una mini cerveza.

Eun-woo saltó del sofá, bebió un trago de cerveza, la dejó sobre la mesa, tomó una zanahoria larga nuevamente y volvió a saltar al sofá.

 

“¡Patea! ¡Patea!”

 

Como los robots de la película, Eun-woo estiró los brazos y pateó con fuerza.

 

“¡Ugh! Escapó de nuevo”

 

Mientras el malvado robot aprovechaba la oportunidad y huía, Eun-woo se desanimó, dejó escapar su fuerza y cayó en el lugar. El sofá, cómodo y con cojines, recibió su cuerpo sin un gran impacto.

Tumbado cómodamente, Eun-woo mordió otra vez la zanahoria. ¿Cómo debería plantear la idea del divorcio a su esposo cuando se encontraran? Dado que él dijo que vendría mañana, probablemente se encontrarían cara a cara al menos una vez. No tenían muchas oportunidades para encontrarse, por lo que cuando se vieran, tenía que decirlo. Después de todo, eran personas difíciles de encontrarse.

Si no podía quedar con él mañana, tendría que comprobar el horario de Jin-hyuk con Ju-won y averiguar cuándo volvería temprano. El corazón que estaba disfrutando de la película felizmente se volvió pesado.

¿Respondería de inmediato si le dijera que quería divorciarse? Francamente, el personaje llamado Jin-hyuk no le resultó fácil de entender, a pesar de haber leído la novela varias veces. La mayor parte de la historia estaba contada desde el punto de vista de Eun-woo, así que no llegó a ver mucho de los pensamientos internos de Jin-hyuk.

Su indiferente marido se volvió más amable y cariñoso después de un incidente. ¿Siempre fue una persona amable? ¿O el incidente despertó un amor que antes no existía? O tal vez siempre lo había amado, aunque no tuviera sentido, pero no sabía expresarlo. Sólo el escritor lo sabía con certeza.

 

“Para qué preocuparse, solo sabrás una vez que te encuentres con él en persona”

 

Después de descansar un rato en el sofá, Eun-woo miró el reloj de pasada y se levantó de nuevo. Era más de las 2 de la madrugada, pero aún no estaba cansado. Y de repente, la película tranquila que estaba viendo volvió a tener escenas de acción. Ese día tenía que terminar de ver toda la serie y luego dormir.

Eun-woo se levantó y empezó a dar golpecitos con el pie en el sofá otra vez. No podía molestarse en bajar cada vez a por una cerveza, así que cogió una cerveza en una mano y una zanahoria nueva en la otra.

 

“Terminaré siendo un conejo de esta manera. No puedo llenar mi estómago solo con zanahorias. La próxima vez comeré patatas”

 

Mientras murmuraba para sí mismo, Eun-woo imitó patadas en el aire siguiendo los movimientos del robot. Con la comida en ambas manos, no podía mover los brazos imprudentemente.

La fiesta de Eun-woo continuó. Aunque ocasionalmente tenía que descansar en el sofá porque su resistencia no le permitía seguir, el entusiasmo aumentaba a medida que los vegetales que preparó al principio desaparecían. Se bebió una mini lata de cerveza que parecía que no le haría daño al hígado, pero el calor en su estómago le hizo sentir borracho.

Cuando la última parte de la serie de películas de robots llegó al final, la oscuridad se desvaneció un poco. A medida que la oscuridad total se desvanecía, un poco de luz se filtraba. En ese momento, la mirada de Eun-woo seguía fija en el televisor.

 

“Uf, estoy cansado. Debería hacer ejercicio. Está muy flácido”

 

Su cuerpo estaba acostumbrado a trabajar toda la noche y a beber, pero ese cuerpo era como el de un muñeco de papel. Al principio, casi estaba de pie mientras veía la película, pero con el tiempo, pasó más tiempo apoyado en el respaldo del sofá.

 

“Vamos, ¡este es el final!”

 

Eun-woo que estaba agotado en su cuerpo sudoroso, se levantó nuevamente. Agarró las últimas verduras que quedaban, un boniato y un pimiento rojo, en ambas manos.

 

“¡Vamos!”

 

Mientras extendía la mano y gritaba, Eun-woo rodó los ojos con una extraña sensación. Estaba seguro de que estaba solo en la casa, pero ¿por qué sentía como si alguien lo estuviera mirando? Eun-woo abrió los ojos y se quedó paralizado como una estatua.

Luego, tiró del brazo que había extendido con precaución hacia sí mismo. Ansioso, mordió el boniato crudo que tenía en la mano. El sonido de la película se mezcló con el crujido del boniato.

Debido a su inquietud, Eun-woo sintió que debía echar un vistazo a su amplia casa, así que bajó lentamente del sofá. Y cuando se giró para mirar detrás de él, se volvió a quedar paralizada como una estatua.

Había un hombre alto vestido con un traje parado allí. Sostenía una maleta de viaje en una de sus manos. De repente, su corazón se aceleró. Sintió el calor en sus mejillas cuando las manos que sostenían los puños se pusieron en contacto. Lo primero que atrapó la mirada de Eun-woo fue el pecho del hombre. El corazón de Eun-woo latía cada vez más rápido mientras inclinaba la cabeza para observar a la persona que tenía delante. Los anchos hombros, la línea del cuello, la barbilla, los labios, la nariz, los ojos...

Los ojos oscuros y profundos se encontraron con la mirada de Eun-woo. En esos ojos no se mezclaba ninguna emoción, solo se veía indiferencia. El hombre que apartó primero la mirada se movió como si nada hubiera ocurrido. Cruzó la amplia sala de estar y entró por una puerta cerrada firmemente en un lado.

Cuando la figura del hombre desapareció por completo y la puerta por la que entró se cerró tras él, Eun-woo se derrumbó y se hundió como si perdiera toda fuerza.

Estaba loco. Lo supo desde el momento en que sintió su presencia. Su esposo. Aparte de Eun-woo, sólo había otra persona que podía entrar y salir de esa casa a esas horas a su antojo. Había alguien ahí que supuestamente no llegaría hasta mañana por la noche.

Eun-woo se examinó lentamente. Lo primero que vio fueron los dedos de sus pies moviéndose y su pijama llamativo con un personaje dibujado. A continuación, cuando pasó la mano por su cabeza, sintió la venda de dormir que cruzaba su frente.

 

“Estoy jodido”

 

Según la novela, Kang Eun-woo llevaba una ropa que no se pondría ni, aunque tuviera un cuchillo en la garganta. ¿Desde cuándo lo habría estado viendo? Eun-woo miró alrededor de la sala desordenada. A pesar de su confusión, la película estaba en su clímax y sonaba a alto volumen. Los cojines que deberían estar ordenadamente colocados en el sofá estaban todos tirados en el suelo.

La mesa de mármol estaba cubierta de latas de cerveza vacías y platos con restos de comida. La manta que había traído para cubrirse en el sofá estaba arrugada de cualquier manera. Eun-woo apagó el televisor con el control remoto. Puso el plato con las verduras en el fregadero y organizó cuidadosamente los cojines que estaban en el suelo en el sofá. Por último, enrolló la manta y cogió la lata de cerveza que se había terminado.

Los hombros de Eun-woo se hundieron mientras caminaba hacia su habitación, al otro lado del pasillo. Una vez dentro, lo primero que hizo fue meter la lata de cerveza en el último cajón del escritorio. No podía permitirse ser descubierto. Y se tumbó en la cama.

¿Qué haría? ¿Qué debía hacer? ¿Qué iba a hacer?

Sus dedos tocaron sus labios una vez más. Sus labios, que estaban hinchados al 1.5 veces de su tamaño normal, eran más suaves y más llenos de lo habitual. Su esbelto cuerpo se estremeció al recordar aquellos impasibles ojos negros que lo habían mirado. La cara de Eun-woo estaba demasiado roja para simplemente decir que estaba sorprendido y confundido. Estaba enrojecida hasta las orejas.

El autor realmente favorecía al protagonista. Parecía que le había dado toda la belleza del mundo al Bottom, y todo el atractivo al Top. Después de todo, Jae-min fue descrito como un chico guapo, pero no lo era tanto, por lo que estaba claro que el autor se enfocó en el protagonista, el Top.

Las cejas espesas y la mirada penetrante. A medida que su rostro venía a su mente, el rostro de Eun-woo se volvía aún más rojo. La cara de su marido le gustaba demasiado. Ah. Por eso le gustaba tanto al Eun-woo de la novela.

No, eso no estaba bien. No podía ser así.

Eun-woo pensó rápidamente en Jae-min. Su amado Jae-min, amable, gentil y considerado. El corazón de Eun-woo, que latía rápido, encontró algo de paz poco a poco.

Por muy guapo y perfecto que fuera el rostro de su esposo, su favorito era el abogado. Eun-woo se sintió avergonzado por su propia vacilación frente al rostro de su esposo, al que nunca había sentido atractivo antes, y se cubrió completamente con la manta hasta la cabeza. Aun así, seguía siendo guapo. El rostro de su esposo seguía brillando en la mente de Eun-woo hasta que se quedó dormido.

 

***

 

Eun-woo se quedó dormido al amanecer, y cuando Ju-won lo despertó, no pudo levantarse de la cama con facilidad. Eun-woo se hundió más en las sábanas y escondió su rostro debajo de la almohada, pero Ju-won no le prestó atención. Eventualmente, Eun-woo fue obligado a levantarse por la fuerza, sentándose en la cama y cubriendo su rostro con las manos.

 

“Por favor, tome su medicina”

 

Eun-woo suspiró suavemente mientras sus muñecas eran agarradas por las manos de Ju-won, que seguía a lo suyo se despertara o no. Suspiró suavemente, sabiendo que Ju-won lo instaría hasta que tomara la medicina. Con una mano sosteniendo las pastillas y la otra sosteniendo una taza de agua tibia, Eun-woo rápidamente tomó la medicina y bebió agua. Le entregó la taza vacía y se volvió a acostar.

 

“El director le está esperando”

 

Los ojos de Eun-woo, que estaban a punto de caer nuevamente en el sueño, se abrieron de golpe. ¿Quién? ¿Quién lo estaba esperando?

 

“Llegó temprano esta mañana, así que desayunaran juntos y luego se irá a trabajar”

 

Eun-woo tiró de las mantas sobre su cabeza y ocultó su rostro. Todavía no estaba preparado emocionalmente. ¿Por qué justo en ese momento? Eun-woo levantó la cabeza ligeramente y vio que el reloj marcaba las 7:50.

Kang Eun-woo no pudo resistirse a las palabras de Choi Jin-hyuk. Estaba enamorado de él y le veía en secreto ir al trabajo, así que no tenía sentido rechazar desayunar con él ahora. Además, acababa de regresar de un viaje de negocios luego de dos semanas.

 

“¿Mi rostro se ve bien?”

 

Apartando el edredón para mostrar su cara, Eun-woo preguntó en voz baja. Esperaba que su alergia empeorara. Al menos tendría una excusa por su rostro.

 

“Sí, ya se ha calmado. Me alegro”

 

Eun-woo hizo un mohín con el labio inferior mientras miraba a Ju-won hablar con una leve sonrisa. No era una buena noticia, era desafortunada. Sin más excusas para huir, Eun-woo se deslizó lentamente fuera de la cama, con los hombros caídos, y entró en el baño.

Mientras Eun-woo se lavaba y se vestía con unos pantalones de algodón, una camisa y un jersey de punto, reflexionó varias veces sobre el momento en que sacaría el tema del divorcio. Sin embargo, cuando imaginaba decir en voz baja y casi susurrando ‘Por favor, vamos a divorciarnos’, no podía imaginar la respuesta de Jin-hyuk.

No, ¿podría decir esas palabras mientras miraba su rostro? ¿Podría hablar sin temblar al mirar su rostro? Estaba preocupado si podría mirar realmente su rostro y hablar sinceramente.

Eun-woo siguió a Ju-won al comedor y, cuando la comida estuvo lista, se sentó frente a Jin-hyuk. Desde que entró en el comedor hasta que se sentó, sus ojos estuvieron pegados al suelo. Aunque no dijo que despejaran la habitación, una vez que Eun-woo se sentó, la tía y Ju-won desaparecieron en algún lugar. No se oía ningún ruido en la silenciosa sala.

Eun-woo miró el arroz y la sopa clara que tenía delante. ¿Alguna especie de sopa de carne de res? Al ver que había rábano y carne de res con cebollas verdes, dedujo seriamente un hecho que ya sabía.

Sólo cuando oyó el pequeño tintineo de los cubiertos, Eun-woo cogió con cuidado su propia cuchara. Le había pillado de una forma muy extraña hacía apenas unas horas, así que había decidido mantener la boca cerrada durante un rato.

El desayuno tranquilo continuó como si estuviera siendo aplastado por una atmósfera pesada.

 

“Hoy no lo haces”

 

Fue Jin-hyuk quien rompió el silencio, su voz hacía juego con su aspecto. Una vez que terminó de hablar brevemente, puso un pequeño plato vacío frente a Eun-woo. Sin comprender sus palabras y acciones, Eun-woo levantó la vista involuntariamente. Estaba comiendo la sopa de carne de res con rábano y tenía la cuchara en la boca.

Eun-woo parpadeó. ¿Qué debería hacer? Recordó rápidamente el contenido del libro, pero no había nada fuera de lo normal. Como Eun-woo era una persona callada, no había tenido muchas conversaciones con él. Aunque había habido escenas de conversación durante la comida más tarde, las cosas no eran así entre ellos en ese momento.

 

“Come arroz”

 

Los ojos de Eun-woo se entrecerraron al oírlo y rápidamente volvió a bajar la cabeza. Un pequeño plato vacío. Los labios de Eun-woo se curvaron hacia abajo. Parecía que la situación entre los dos era peor de lo que había pensado. Después de todo, la sopa y el arroz eran cosas que cada uno comía por separado. Entonces, ¿la razón por la que puso un plato vacío delante de él fue para que comiera menos porque no quería compartir con él ni siquiera los acompañamientos?

De repente sintió tanta pena por el Eun-woo de la novela. Ser tratado así por alguien a quien quería y amaba tanto. Recordó la mirada indiferente y desinteresada en sus ojos cuando pasó junto a él esa mañana. Frío e indiferente. Probablemente presentó un contrato prenupcial desde el principio para establecer límites.

Ni siquiera quería mezclar los palillos. No podía pensar en ninguna otra razón que no fuera esa. Hoy no lo estaba haciendo, lo cual era inusual. Siempre lo hacía. Jin-hyuk también sabía eso. ¿Incluso su esposo, con el que apenas se veía, sabía de sus costumbres? ¿Y comportamientos?

¿Evitaba Jin-hyuk mezclar los palillos porque le disgustaba? ¿Cómo se atrevía Eun-woo, que era extremadamente tímido, a comer comida en el mismo plato que él? ¿Usaba un plato separado mientras lo hacía?

Absorto en sus pensamientos, no sabía si la comida iba a su boca o a su nariz. Y en el plato junto a Eun-woo no había nada.

Eun-woo solo comió arroz y sopa. Si esa era la vida que Eun-woo había vivido hasta ahora, tenía que mantenerla de esa manera. Aunque siempre era alegre, enérgico y positivo, desde que llegó a este lugar, estaba constantemente agotado. No había mucho que pudiera hacer para levantar el ánimo.

Eun-woo bajó la cuchara sin terminar de comer para no molestarlo. Se levantó con cuidado, le dio las gracias y se fue. Eun-woo no lo sabía, pero era la primera vez desde que conoció a Jin-hyuk que éste lo dejaba solo en una comida.

 

***

 

“¿Tienes más que informar?”

 

Jin-hyuk le hizo la pregunta a Hyun-soo, quien seguía sin salir a pesar de que la discusión sobre la agenda del día había terminado. Era más tarde de lo habitual, pero había llegado medio día antes de un viaje de negocios, así que le sobraba tiempo.

 

“¿Es sobre Eun-woo?”

 

Todo el tiempo que había estado trabajando, su mente no había estado en el trabajo, sino en una persona, alguien a quien había estado observando durante bastante tiempo, pero era la primera vez que la veía en tal estado. Por la forma en que Hyun-soo vaciló, Jin-hyuk concluyó que ya estaba relacionado con él. Era trabajo de Hyun-soo informar sobre lo que hacía Eun-woo, pero tenía cierta aversión a transmitirlo de manera diferente a otros informes.

 

“Hace unos días, visitó un centro comercial”

 

¿Él, que rara vez salía de casa, fue a un centro comercial? ¿Con quién se reunió? Se le ocurrieron varias ideas, pero la expresión de Jin-hyuk no cambió en lo absoluto.

 

“¿Algún problema?”

 

Un problema, Eun-woo nunca haría eso. Estaba acostumbrado a borrar sus rastros en cualquier lugar. Aunque tenía una apariencia más llamativa que la mayoría, si no se le prestaba atención, desaparecía en un instante. No importaba si era en casa o en una reunión a la que iban como pareja.

Cuando llegaba el momento de regresar, aparecía en silencio.  Si más tarde se verificaba dónde había estado, simplemente había descansado en algún lugar a solas. Fue un poco sorprendente que fuera a un gran centro comercial, pero podía ser posible.

Hyun-soo vaciló y le tendió un trozo de papel. La expresión de Jin-hyuk se arrugó al mirar el papel. Miró la lista de sus compras y no pudo entenderla fácilmente.

 

“¿Los compró y los llevó el mismo?”

“Sí. La ropa deportiva sí, pero el juego parecía ser pesado y lo envió a casa”

 

Las compras de Eun-woo incluían una consola de videojuegos, chándales y zapatillas de una marca popular, un pijama y un saco de dormir de una tienda de personajes. El pijama era de un color amarillo chillón. El pijama era de un color amarillo pollito, y recordó el rostro de un pingüino dibujado en él. Y lo que llevaba en la cabeza parecía ser un antifaz para dormir. Probablemente los había comprado allí.

Estaba amaneciendo, justo cuando el sol estaba a punto de salir. El sonido que detuvo los pasos de Jin-hyuk al abrir la puerta principal fue demasiado fuerte. Se apresuró a entrar, y lo primero que vio fue una escena de robots peleando en la televisión. Lo siguiente que notó fue cómo la sala de estar, que solía estar impecable sin el más mínimo rastro de polvo, se había convertido en un desastre.

Y, por último, una persona saltando en el sofá. ¿Había estado viendo películas toda la noche con aperitivos? ¿Kang Eun-woo? ¿Incluso estaba viendo una película de acción tan ruidosa que le zumbaban los oídos? Recordó cuando intencionalmente fueron al cine para mostrarse a los demás como pareja antes de casarse, lo que Eun-woo eligió fue una película de romance tan tranquila que llegaba a ser aburrida.

Eun-woo se mantenía erguido con la espalda recta, sin perder detalle de la pantalla. Parecía una muñeca perfectamente colocada. La apariencia de Eun-woo era tan diferente como los géneros de las películas. Mientras agitaba sus esbeltos miembros en el aire, absorto en la acción, podía oírlo gritar: “¡Patea! ¡Patea!” e “Idiota, ¿eso es todo?”. En ese momento, debería haberlo ignorado, pero se decía que la curiosidad mató al gato.

Eun-woo era demasiado maduro para su edad. Él había conocido su lado reservado, la forma en que no hacía lo más mínimo de lo que uno haría a su edad. Se detuvo en seco y lo observó.

¿Qué estaba sosteniendo en sus manos? Al mirar más de cerca, se vio obligado a contener la risa al darse cuenta de que era una zanahoria y un pimiento.

Era el Eun-woo más alegre y feliz que había visto nunca. Un día, vio una leve sonrisa en su rostro mientras pulía sus herramientas. Siempre era tímido delante de él. Nunca se miraban a los ojos, siempre estaba deprimido y oscuro. Estaba atrapado en la tristeza y apenas hablaba. Siempre quiso escapar de la situación en la que se encontraba si tenía la oportunidad.

¿Esa era su verdadera personalidad? Si ese fuera el caso, ¿cómo lo ocultó todo ese tiempo? ¿Siempre era así cuando él estaba fuera en un viaje de negocios o cuando dejaba la casa? Mientras pensaba en muchas cosas, su mirada se encontró con la de Eun-woo.

Su cuerpo se puso rígido por la sorpresa. La sonrisa se desvaneció lentamente de su rostro brillante y alegre mientras lo miraba con los ojos muy abiertos. Fue sustituida por la habitual mirada sombría y oscura. Las piernas que habían estado saltando sobre el sofá como si volaran bajaron ligeramente al suelo y su cabeza se inclinó hacia el suelo. El espacio incómodo entre ellos fue llenado por la música estruendosa de la película.

Jin-hyuk optó por huir. Después de entrar en su habitación y cerrar la puerta, se sintió un poco amargado cuando la música de la película se detuvo de repente. Cuando salió después de ducharse, la sala de estar estaba llena de silencio. El lugar que estuvo lleno de vida parecía como si nunca hubiera sucedido algo así.

 

“¿Hay algo más?”

“Se encontró con el Sr. Jae-min, y tarde en la noche en una tienda de conveniencia, compró fideos instantáneos y triángulos de arroz. También compró refrescos, y al día siguiente fue al hospital con una reacción alérgica”

 

Jin-hyuk enarcó las cejas y apartó la mirada de la lista de compras para mirar a Hyun-soo.

 

“¿Eso es todo?”

“Sí”

“Como siempre digo, sólo observa y no te involucres”

“Lo tendré en cuenta”

 

Cuando Hyun-soo terminó su informe, hizo una reverencia a Jin-hyuk y se marchó. Cuando Hyun-soo se marchó, Jin-hyuk se quedó solo en la amplia oficina, dio vueltas a su bolígrafo y miró por la ventana. El cielo de finales de otoño estaba completamente despejado y azul.

Había un problema al considerar que su apetito había cambiado. Kang Eun-woo no comía cebolletas. No era alérgico a nada, pero había algunas cosas que no comía. Una de ellas eran las cebolletas de la sopa de res. Normalmente, las habría quitado. En retrospectiva, parecía que se sorprendió al ver el plato vacío.

Fue por casualidad que se dio cuenta de que no comía cebollas verdes. Un día, mientras comían juntos, se preguntó por qué tenía algo de comida en la boca. Sin saber por qué, en algún momento le había empujado un plato vacío. Entonces, Eun-woo sacó la cebolleta que había estado poniendo mucho en la sopa. Después de eso, cada vez que Jin-hyuk le ponía un plato vacío delante, Eun-woo sacaba una cebolleta sin decir nada.

Esa mañana, sin embargo, no quedaban cebolletas en su plato de sopa, el cual no había terminado de comer y se fue con una inclinación. El plato seguía vacío. Tal vez se sintió angustiado al verlo en la madrugada. Todavía tenía la cara hinchada por la falta de sueño.

Podría haberlo dejado dormir, pero era codicioso. Quería ver ese rostro deprimido, angustiado y melancólico florecer como una flor. Pero confirmó que cuando estaba con él, nunca mostraría esa apariencia.

 

“Qué te ha cambiado, Kang Eun-woo”

 

El bolígrafo que Jin-hyuk estaba haciendo girar cayó sobre la mesa. Se le pasaron muchas cosas por la cabeza, pero decidió quedarse callado y observar.

Cuando tenía ocho años y le dijeron que un recién nacido era la persona con la que se casaría, se burló. Pero a medida que fue creciendo, le lavaron el cerebro para que se lo tomara al pie de la letra hasta el punto de que lo sentía como clavos en sus oídos y se volvió insensible.

A los 20 años. Cuando le dijeron que se casara con Eun-woo, que aún era un niño, no se lo podía creer. ¿Qué se suponía que debía hacer con la vida de ese niño? Debió crecer sintiendo los mismos clavos en sus oídos tanto como él.

No era un matrimonio basado en el amor, sino en un trato entre familias. Y cuando se encontró con él de adulto, Eun-woo no lo miró, sólo estaba deprimido y con una expresión sombría. Parecía obligado a aparecer debido a las circunstancias que lo rodeaban. ¿Cuánto querría jugar y explorar más el mundo? Por eso aplazó el matrimonio hasta después de que se graduara en la universidad.

Cuando se encontraban en reuniones ocasionales, Eun-woo no parecía feliz. Un niño obediente. Vivía de acuerdo con lo que se le ordenaba en su familia. Así que el día de su boda, le entregó un contrato personalmente.

Como no podía poner fin a eso, le daría libertad. Podía hacer lo que quisiera.

Tras recibir el contrato, Eun-woo volvió a asentir. Ni una sola vez oyó una palabra de negación de su boca. Jin-hyuk tampoco estaba contento con ese matrimonio, y así pasó el tiempo mientras vivían como cualquier otra pareja de escaparate. Él se quedaba fuera de casa todo lo posible por su bien, que no salía de su habitación si no se sentía confiado.

Escuchó el informe de Hyun-soo. Dijo que cuando él no estaba, a veces salía a la sala a ver la televisión. Cuando dijo que leía libros en la biblioteca y pasaba el tiempo cómodamente en la casa, Jin-hyuk no se atrevió a entrar ahí, incluso si quisiera. Si estuviera allí, el niño no estaría atrapado en una casa, sino en una habitación aún más pequeña.

 

***

 

“¿Qué debo hacer? Parece que descubrió todo. ¿Debería simplemente pedir el divorcio?”

 

De vuelta a su habitación, Eun-woo decidió descansar primero. Durmió profundamente y se despertó para ver el atardecer, paseándose por la estrecha habitación. Recordó el caos en la sala de estar esa madrugada y le molestó la extraña comida de la mañana. Decidido a divorciarse, Eun-woo organizó los detalles de la pensión que solicitaría. También investigó diligentemente sobre el divorcio por mutuo acuerdo.

Lo único que tenían que hacer era acudir juntos al juzgado de familia o de distrito, presentar una demanda de divorcio colaborativo y los documentos necesarios, y pasar por un periodo de mediación de un mes. Sólo un mes de esa impresionante farsa que podría descubrirse en cualquier momento. Eun-woo apretó los puños mientras pensaba en ello.

Mañana por la mañana, a primera hora, iba a ir a reunir todo el papeleo, e iba a rellenar las partes que tenía que rellenar. Y la cantidad de pensión y los bienes inmuebles que quería conseguir... sería difícil. Debería haber intentado algo así para entenderlo.

Eun-woo, quien estaba escribiendo varias cosas en papel, borró frenéticamente lo que había escrito con un bolígrafo.

 

“Cuando no sepas, busca a alguien que sepa”

 

Eun-woo buscó en su lista de contactos de su teléfono móvil y su dedo se detuvo frente a un nombre. Así es como resultó. Debería ver más el rostro de su favorito. No importaba que le gustara a Jae-min y que también le gustara a él. El problema era su familia. Claramente, él, un divorciado mayor, no sería bienvenido en su familia.

Pero eso no significaba que debiera arruinar su vida y decirle a su favorito: ‘¡Por favor, ámame!’ Sería mejor aprovechar el divorcio como una excusa para ver su rostro y luego mantener una amistad como ahora. Parecía que mantener su relación bajo el nombre de amistad sería lo mejor después del divorcio.

 

[Kim Jae-min]

 

Una vez tomada su decisión, Eun-woo pulsó el botón de llamada. Amor mío, deberíamos ir a cenar juntos. En un lugar con un ambiente agradable, cortarían algo de carne, no esas cosas seriamente saludables. Si había algún problema, aún tenía las pastillas para las alergias, así que las podía tomar si surgía algún problema.

Las comisuras de los labios de Eun-woo se levantaron suavemente mientras escuchaba el tono de llamada.

 

***

 

De pie frente al espejo, Eun-woo permaneció largo rato frente a él. No era cualquier persona, estaba yendo a encontrarse con Jae-min. No importaba cuánto intentara calmarse, no pudo ocultar sus mejillas sonrosadas. Había renunciado a calmar su corazón inquieto que latía sin control.

Se bañó meticulosamente y se roció un poco de perfume de su tocador. Aunque no era su estilo, se puso unos pantalones formales con una camisa y un suéter. Se puso una chaqueta de lana fina y se miró varias veces en el espejo para verificar su apariencia.

Primera cita.

Era la primera cita de la vida de Eun-woo. Aunque la otra persona no sabía que era una cita, él lo sentía como tal mientras hacía una reserva en un restaurante elegante. Había quedado con alguien que le gustaba. Por supuesto, la conversación sería muy extraña, pero se sentía más feliz que nunca.

Mientras esperaba a Jae-min, quien vendría a buscarlo frente a su casa, Eun-woo se movía inquieto. A medida que el tiempo pasaba y se acercaba el momento de encontrarse, su corazón latía más rápido. Se cubrió la cara con las manos y apretó sus mejillas enrojecidas. Estaba emocionado por saber lo guapo y amable que era Jae-min.

¿De qué hablaría? Midiendo el ambiente, iba a pedirle que lo ayudara a divorciarse, pero antes de eso, tenían que hablar de cualquier otra cosa. Tal vez hablaran del clima, preguntándose si ese día estuvo ocupado o cómo le iba en el trabajo. También podría preguntarle sobre su color favorito de forma casual. Pronto sería el cumpleaños de Jae-min, pero como no podía organizar una fiesta llamativa, quería darle un regalo significativo en su lugar.

 

“Te dije que esperaras adentro, ¿por qué estás esperando afuera con este clima frío?”

 

Eun-woo, quien estaba distraído pensando en cosas que le quedarían bien a Jae-min, levantó rápidamente la cabeza ante la voz acogedora.

 

“Por ahí no, por aquí”

 

Cuando se giró para buscar a Jae-min, oyó una voz risueña detrás de él.

 

“Llegaste rápido”

 

Torpemente, Eun-woo contestó en voz baja. Como era de esperar, él le rodeó la cintura con el brazo y lo llevó hasta el coche aparcado. Ese día iba muy elegante, con un traje a rayas. Eun-woo se pasó una mano por el pecho, temiendo que él oyera los latidos de su corazón.

 

“Si mi Hyung me llama puedo ir a donde quiera”

 

Como siempre, las dulces palabras de Jae-min eran difíciles de superar. Eun-woo mordió sus labios mientras sentía el calor del aire dentro del auto y el asiento, que había sido preparado considerando su comodidad.

 

“¿El asiento está caliente?”

 

No solo sus palabras eran dulces, sus acciones también eran muy dulces. Eun-woo quiso reírse a carcajadas cuando se dio cuenta de que todo aquello estaba hecho para su beneficio, pero apretó las muelas y rápidamente apartó la cabeza hacia la ventana para evitar que su rostro sonrojado se notara.

 

“Está bien, está cálido”

 

Una parte de él quería darse la vuelta y sentarse junto a Jae-min, tocarle la mano, mirarle a los ojos y contemplar anhelante su atractivo rostro. Pero Eun-woo miró por la ventana con lágrimas en los ojos. No sabía cuánto tiempo más podría esperar.

 

***

 

“Creía que a mi Hyung sólo le gustaba la comida coreana”

 

En una tranquila sala de un restaurante de lujo, Eun-woo usaba el tenedor y el cuchillo con suma elegancia. Nunca antes había estado en un lugar como ese, así que había estudiado diligentemente en internet. Desde el orden de uso de los cubiertos hasta los modales y la etiqueta en la mesa.

 

“Me encanta la comida coreana, pero también la comida como ésta”

 

Eun-woo apretó los puños bajo la mesa mientras veía a Jae-min comer delante de él con una apariencia fotogénica. Como era de esperar, los dos no hablaron mucho y simplemente disfrutaron de la comida juntos.

A pesar de que tiempo con Jae-min fue incómodo también fue placentero. Su imagen reflejada en el gran ventanal era impresionante, pero la realidad frente a él era aún más impresionante.

Eun-woo ladeó la cabeza al ver sus grandes manos y sus músculos moverse con cada movimiento del tenedor y el cuchillo. Vio sus propias manos, pequeñas y blancas, y su mirada se posó en el anillo de su dedo anular izquierdo.

La alianza de Eun-woo y Jin-hyuk, un fino anillo de platino sin nada grabado. No sabía si estaba en el dedo de Jin-hyuk, pero Eun-woo no se lo había quitado desde su boda. Se cubrió la mano izquierda con la derecha para ocultar el anillo. La comida estaba llegando a su fin, y era el momento de decir lo que había estado pensando.

La punta de su lengua humedeció ligeramente sus labios secos. Frunció los labios e intentó hablar, pero las palabras no le salían con facilidad. ¿Qué pasaba? ¿Por qué? Y entonces se dio cuenta. Había pensado en el divorcio innumerables veces, pero en realidad nunca había dicho la palabra divorcio en voz alta. Era la diferencia entre pensarlo y hacerlo.

 

“Jae-min”

“Sí. Hyung”

 

Jae-min respondió de inmediato cuando Eun-woo lo llamó.

 

“Divorcio...”

 

Eun-woo cerró los ojos con fuerza y pronunció las palabras que tenía en los labios. Al mismo tiempo, los cubiertos chocaron contra el plato, haciendo un sonido bastante fuerte.

 

“Has oído bien, quiero el divorcio. No, necesito el divorcio”

 

Eun-woo lo afirmó varias veces antes de que Jae-min pudiera preguntar. En ese momento, sus ojos se llenaron de lágrimas. Por alguna razón, las lágrimas cayeron por sus mejillas. No era su intención en absoluto. Sin embargo, estaba agradecido por las lágrimas que fluían en un momento tan importante.

 

“Eun-woo Hyung”

 

Según la costumbre de Eun-woo en la novela, habría limpiado las lágrimas de su manga a la ligera en la manga, pero por alguna razón parecía que no podría controlar su expresión facial, así que Eun-woo sacó un pañuelo de su bolsillo y cubrió ligeramente su rostro.

 

“Yo... yo...”

 

Qué momento para estar agradecido. Unas lágrimas seguidas de un nudo en la garganta se tragaron su voz. Eun-woo sonrió, ocultando su rostro en el pañuelo, mientras sentía el revuelo frente a él. Era una situación extraña, sonrió entre lágrimas, pero todo estaba oculto por el pañuelo.

 

“¿Pasó algo?”

 

Eun-woo levantó un poco la cara al oír la voz de Jae-min más cerca, luego volvió a agacharse y se cubrió la cara con el pañuelo. El guapo abogado que se había acercado a su lado de repente, su favorito, se arrodilló y lo miró. Al ver la preocupación reflejada en su rostro, su rostro se sonrojó de nuevo.

 

“Ayúdame”

 

Eun-woo levantó la vista y vio su reflejo en la ventana. Oh, Dios. Era perfecto. No había nada mejor que eso. El modo príncipe en ruinas, con toda la pena y el dolor del mundo, se activó de nuevo. Parpadeó, y una sola lágrima cayó de sus grandes ojos. Su voz baja murmurada se combinó y generó más compasión.

 

“No llores. Si lloras, te dolerá la cabeza. Hyung, está bien. Te ayudaré con cualquier cosa”

 

Asintiendo ligeramente con la cabeza, una mano grande y cálida tocó la mejilla de Eun-woo. No podía decir si era él mismo quien temblaba o si era la mano de Jae-min que tocaba su mejilla. Al sentir su pulgar limpiando sus lágrimas, apartó rápidamente la cabeza.

Una parte de él quería coger su mano entre las suyas y frotar su mejilla contra ella, pero aún no era el momento. Aunque lamentaba dejar esa mano en el aire, todavía no era el momento adecuado.

 

“¿Puedes contarme qué pasa? No tienes que decirlo todo, pero tienes que hablar un poco”

“Es un poco embarazoso”

 

Eun-woo sacó la historia que había preparado con esfuerzo y comenzó a hablar. Trató de crear una historia que todos conocieran sin dañar la obra original. Sin embargo, no era necesario decirle todo a Jae-min. Por ejemplo, que realmente necesitaba el divorcio para vivir su vida a su manera, o que su guapo marido lo odiaba. No le diría que le gustaba, o que quería conseguir todo lo que pudiera y vivir como un derrochador.

Le dijo que quería escapar de su hogar familiar y ser libre. Expresó su deseo de un divorcio amistoso y le pidió a Jae-min que lo ayudara con los documentos y los procedimientos necesarios.

Tardó un rato en contar su historia, sollozando entre lágrimas sin parar, pero Jae-min escuchó pacientemente. Después de que la historia terminó, se levantó lentamente y puso su mano en el hombro de Eun-woo por un momento antes de soltarlo.

 

“Entiendo lo que quieres decir, reuniré el papeleo necesario esta semana”

“No tenía a nadie a quien recurrir por mi situación, me alegra que estés aquí”

 

Eun-woo dio el discurso que había estado preparando y dejó escapar un largo suspiro. Era un divorcio chaebol. Aunque quería mantenerlo en secreto, sabía que de alguna manera se filtraría. Sin embargo, si su abogado personal era Jae-min, al menos podría minimizar el alboroto.

 

“¿Cuándo se lo vas a decir a Jin-hyuk?”

 

Eun-woo se mordió el labio inferior. ¿Tan pronto como fuera posible? Probablemente tendrían que reunirse para poder hablar. Debería pedirle a Ju-won que le diera el horario de Jin-hyuk cuando regresara a casa.

 

“Pronto”

 

Acababa de recordar otra razón por la que él y Jae-min no funcionaron. Jae-min, hijo de una famosa familia de abogados, tenía conexiones no solo con él, sino también con Jin-hyuk. Eran como hermanos, con una relación de hermano mayor y hermano menor. Tal vez, la razón por la cual Eun-woo podía encontrarse cómodamente con Jae-min era porque Jin-hyuk lo entendía. Estaba seguro de que incluso si los dos, alfa y omega, se encontraban, no habría ningún problema.

El Jae-min original siguió siendo el amigo íntimo de Eun-woo hasta el final. Su firme amor no correspondido continuó. Su firme amor no correspondido fue enterrado en una historia conocida sólo por el autor.

 

“Gracias por decírmelo”

 

Jae-min observó el perfil de Eun-woo mirando por la ventana. Sus ojos, enrojecidos por el llanto, y la punta de su nariz se reflejaban en la ventana. Su rostro estaba lleno de tristeza. Se preguntó lo difícil que había sido para Eun-woo, que era tan paciente y comprensivo, decirle esas palabras a él. Era evidente que había sufrido en silencio, soportando el dolor con su pequeño cuerpo.

Al mismo tiempo, sus emociones impuras se alzaron sin control. En cuanto le contó lo de su divorcio, no pudo controlar su expresión. Estaba triste por él, pero su sonrisa seguía apareciendo. Él sería libre, no alguien cercano a su Hyung como amigo.

Ahora tendría su oportunidad. Estaba tan agradecido de que renunciara a Jin-hyuk, quien solo le causaba tristeza y dificultades. Estaba dispuesto a sacrificarlo todo por él para que Eun-woo pudiera ser feliz. Por lo tanto, debía hacer todo lo posible para que el divorcio de los dos se llevara a cabo de alguna manera.

 

***

 

“Me pondré en contacto contigo en cuanto tenga listo el papeleo”

 

Al detener el coche frente a la casa, Jae-min volvió a hablar, asustado de que aquello no fuera más que un breve capricho.

 

“Gracias. Solo espero que no interfiera con tu trabajo. Y también hablaré con el Sr. Jin-hyuk esta semana”

 

Una respuesta satisfactoria salió de la boca de Eun-woo. Saliendo del coche para abrir su puerta, Jae-min se rozó la cara con ambas manos. Apretó suavemente con las yemas de los dedos las comisuras de sus labios que se curvaban hacia arriba. Era tan tierno ver a Eun-woo esperando tan tranquilo a que le abriera la puerta.

Aguanta. Sólo un poco más, solo un poco más de paciencia.

De Eun-woo, quien pasaba a su lado, emanaba un agradable aroma. Jae-min extendió la mano para agarrar su muñeca y reprimió el deseo de abrazarlo y aferrarse a él.

 

“¿Necesitas que te lleve a casa?”

“Solo tengo que subir al ascensor. Hace frío y es tarde, y no quiero quitarte tiempo”

 

Ver a Eun-woo preocupándose por él hablándole en voz baja y tranquila hizo que Jae-min sonriera más que nunca. Tenía que posponer todo lo que estaba haciendo en ese momento y trabajar en ese asunto. El divorcio por consentimiento mutuo sería lo más fácil. El problema era Jin-hyuk, cuyos pensamientos eran desconocidos. ¿Dejaría ir a Eun-woo tan fácilmente?

 

“Entra con cuidado”

 

Cuando Eun-woo se despidió de Jae-min, él le apretó el hombro una vez, como había hecho en la cena, y luego lo soltó. Eun-woo se dio la vuelta y se alejó, tocándose el labio inferior con una especie de pesar melancólico.

Ese chico. ¡Podría abrazarlo al menos una vez! ¡Ah! Su Hyung lo estaba pasando mal ahora, ¿acaso también le gustaba? ¡debía hacer como que no sabía! Si lo abrazaba, haciendo como si no supiera y lo acurrucaría en su ancho pecho. ¡Oh! Era beneficioso tanto para su Hyung como para su cuñado. Mataría dos pájaros de un tiro. En cualquier caso, era algo bueno para ambos.

Con lágrimas en los ojos debido a su acto gentil hasta el final, Eun-woo se dirigió a casa. Ahora estaba en paz, aunque no pudiera comer. Como había dicho a Jae-min, se prepararía diligentemente. Entonces, no había más opción que hablar con Jin-hyuk lo antes posible.

¿Cuándo debería decírselo? Le preguntaría a Ju-won por su horario mañana por la mañana, y si realmente no estaba disponible, ¿debería ir a la oficina? De todos modos, hablar de divorcio era algo que iba en contra de la lógica, así que supuso que comprendería si fuera a la empresa.

Con pensamientos complicados, Eun-woo abrió la puerta y entró. Su corazón se hundió al ver los grandes zapatos colocados en el recibidor. Luego, rápidamente verificó el reloj en su muñeca.

Eran las 10:17 p.m.

Ju-won estaba en casa después de trabajar. No podía darse la vuelta porque podría haber escuchado el sonido de abrir la puerta. Aún no estaba preparado emocionalmente. ¿Era hoy el día? Sentía que debía resolver todo hoy, sin importar qué.

Se puso las pantuflas y entró en casa. Solo el candelabro de la sala de estar estaba encendido, creando una atmósfera suave. Jin-hyuk estaba sentado en el sofá viendo las noticias. Eun-woo caminó sin hacer ruido mientras consideraba si debería saludarlo y pasar o simplemente pasar sin decir nada. Sus preocupaciones mientras caminaba por el largo pasillo de la casa terminaron con unas simples palabras de él.

 

“Llegas tarde”

“Yo... cené con Kim Jae-min...”

 

No fue intencional, pero, como era de esperar, una pequeña voz apagada escapó. Rápidamente buscó en su mente cómo solían hablar entre ellos. Pero esos dos no solían tener conversaciones fluidas. Incapaz de decidir si ser extremadamente respetuoso o moderadamente respetuoso, Eun-woo optó por tartamudear.

Eun-woo, que había estado mirando al suelo, levantó la vista al no oír respuesta. Parecía que podía pasar de largo. Los ojos de Eun-woo se posaron en una botella de vino. Mientras Eun-woo prefería las bebidas alcohólicas ligeras con sus vegetales, para Jin-hyuk, el vino era una especie de aperitivo.

Aunque Eun-woo no sabía mucho sobre vino, era algo famoso que conocía. Quería probarlo y sin darse cuenta, tragó saliva. Pero si ese cuerpo bebía un solo trago de esa botella de vino, probablemente causaría un alboroto.

Cuando desvió la mirada, vio a Jin-hyuk sentado cómodamente en el sofá, cruzando las piernas y mirándolo con satisfacción. Y en su mano, había un vaso de licor vacío. Parecía que había bebido un poco de alcohol. Entonces, ¿era esa una oportunidad?

El cuerpo de Eun-woo se movió antes que su mente. De repente, sintió un dolor en la rodilla, y en un instante, se encontraba arrodillado en el lugar donde había estado parado.

 

“Quiero el divorcio”

 

Una frase salió de su boca sin pasar por su mente. Mientras observaba el diseño del suelo de mármol, Eun-woo mordió su lengua. Ahora las cosas se habían complicado. En esta situación, no sabía si era apropiado estar de rodillas al hablar, pero era demasiado tarde para recoger sus palabras.

El sonido de un vaso de cristal golpeando la mesa y el sonido del televisor apagándose resonaron juntos. Eun-woo apretó su cabeza con las manos y esperó a que contestara, con los ojos desorbitados.

 

“Kang Eun-woo. ¿Hablas en serio?”

 

Fría. La voz era fría y cortante. Mordiéndose la punta de la lengua, se limitó a asentir.

 

“¿Por qué?”

 

Era una pregunta natural para él.

 

“Quiero… vivir”

 

Estás loco, Kang Eun-woo, y dices cosas que no pasan por tu cerebro.

Que tontería acababa de decir. ¿Quería vivir? Cuando estaba hablando con Jae-min, habló bien, como pensó que lo haría, pero ahora era un desastre.

En lugar de una respuesta, se oyó un profundo suspiro, seguido del sonido de unas pantuflas arrastrándose por el suelo. Luego sus ambos brazos fueron agarrados por manos grandes y, en contra de la voluntad de Eun-woo, fue levantado. En cuanto se incorporó, le soltó los brazos, como si hubiera tocado algo que no debía.

Otra lágrima rodó por su mejilla. ¿Los conductos lagrimales de ese cuerpo eran totalmente automáticos? No tenía la intención de llorar, pero se sentía desconcertado de que las lágrimas fluyeran tan fácilmente.

Después de todo, el personaje original también era bastante llorón. No podía hablar y solo soltaba lágrimas, pero ahora que estaba en ese punto, tal vez no fuera porque quería llorar, sino porque el sistema de producción de lágrimas estaba defectuoso. Rápidamente levantó las manos y se secó las lágrimas. Pero por mucho que se las secara, volvían a salir.

 

“¿Tanto lo odiabas?”

 

Abrió la boca para hablar, pero le temblaron los labios y no salieron palabras. Tenía la respiración entrecortada y su voz no salió. ¡Habla! ¿Por qué no podía hablar? Eun-woo se atragantó con la respiración y se golpeó el pecho izquierdo con el puño.

 

“Kugh”

 

Se golpeó el pecho mientras lloraba y esta vez le salió una tos. Estaba actuando de diferentes maneras. Manteniendo la lengua hacia atrás en su boca, Eun-woo tapó su boca con ambas manos para detener la tos incesante.

 

“De acuerdo. Haré lo que quieras”

 

El cuerpo de Eun-woo se detuvo abruptamente. ¿Fue tan fácil? ¿Solo con decirlo? ¿Por qué sonaba tan impotente? Le pareció que la voz que acababa de escuchar estaba herida de alguna manera.

Esos dos no tenían una relación tan profunda. ¿Y si pasaba algo tres meses después y sentían algo el uno por el otro y se convertían en una pareja de verdad? Cuando Eun-woo levantó la cabeza con los ojos sorprendidos, vio la espalda de Jin-hyuk.

No. ¿A dónde iba esa persona? Era un divorcio de mutuo acuerdo, así que tenían que hablar de los términos del divorcio o algo.

 

“Si tienes alguna condición que quieras, dilo. Haré todo lo posible para complacerte”

 

Mientras entraba en su habitación y cerraba la puerta, dejó esas palabras atrás. Luego cerró la puerta de golpe. Mientras Eun-woo lo observaba, parpadeó y lágrimas comenzaron a rodar por su mejilla.

¿Libre? ¿Se había vuelto libre tan fácilmente? ¿Libre para hacer lo que quisiera? Además, dijo que cumpliría todas sus condiciones. Los pies de Eun-woo se movieron espontáneamente. No podía contener su alegría. Sus sueños se harían realidad. Jae-min, debía esperarlo. Hyung convertiría su relación en algo más cercano con él.

 

Los pasos de Eun-woo eran tan ligeros como siempre mientras se dirigía a su habitación, con la cabeza gacha, para que no lo vieran sonreír. Pero, ¿cuándo debería contarle los detalles? ¿debía hacer una lista primero?

Al entrar en la habitación, Eun-woo se detuvo y miró hacia atrás, con la puerta cerrada tras él. Aunque claramente era algo alegre y bueno, algo dentro de él se sentía incómodo. ¿Cuál era el problema? ¿Qué podría ser el problema? Pero sus preocupaciones no duraron mucho.

El cerebro de Eun-woo, al que le gustaban las cosas sencillas y agradables, ignoró esa extraña sensación. Sin saber qué remordimientos podría tener más tarde.

 

***

 

Eun-woo, que normalmente se quedaba despierto toda la noche y se dormía al amanecer, abrió los ojos antes de que Ju-won lo despertara. Se sentó en su escritorio y escribió las cosas que quería recibir. Aunque su caligrafía solía ser mala, ese personaje tenía una letra preciosa. Su cara era hermosa, su letra era hermosa. ¿Dónde no era hermoso?

El problema era la parte del dinero. Parecía que también debía recibir algo de dinero, pero ¿cuánto debería pedir? No podía tener una idea clara de cuánto podría recibir. No pudo decidir si sería mejor recibir dinero en efectivo o en oro. Por lo tanto, no pudo completar esa parte.

 

“¿Joven Maestro?”

 

Hubo dos golpes en la puerta y Ju-won llamó a Eun-woo, sonando un poco sorprendido. Solía despertarlo todo el tiempo, por lo que fue sorprendente verlo levantado y sentado en el escritorio antes de que lo despertara.

 

“Ya me levanté”

 

Eun-woo respondió con una sonrisa tímida.

 

“El director lo espera para desayunar”

 

El bolígrafo resbaló de la mano de Eun-woo y rodó. ¿Por qué? Ah, ¿estaba tratando de tener esa conversación que no pudieron tener ayer? Sus dedos temblaron mientras doblaba el papel que acababa de escribir. Era inevitable. Ya casi era hora de poner fin a esa fastidiosa farsa.

Eun-woo se levantó y se puso delante del espejo. Estaba tan puro y hermoso como siempre, pero tenía los ojos un poco hinchados de haber llorado dos veces ayer. La verdad era que se veía lindo, incluso más que antes.

 

“Hagámoslo bien”

 

Eun-woo se abofeteó ligeramente las mejillas con las manos. Ahora era el momento de negociar. Aunque no sabía mucho, sabía que debía obtener lo suficiente como para compensar una villa en Hannam-dong. Durante el corto tiempo en que Eun-woo investigó, descubrió que ese lugar era el más caro de todas las propiedades que había propuesto. Y seguiría siendo un lugar de inversión valioso en el futuro.

Cuando Eun-woo se sentó frente a Jin-hyuk, la tía que los ayudaba y Ju-won desaparecieron en algún lugar. Solo se escuchaba el sonido tranquilo de los cubiertos moviéndose en medio del silencio. Tras una larga pausa, Eun-woo colocó la hoja de papel que había doblado sobre la mesa y la deslizó un poco hacia adelante antes de soltarla. Jin-hyuk se tomó un momento para recogerlo y, cuando lo desdobló, el corazón de Eun-woo se hundió.

Jin-hyuk abrió el papel que le tendía Eun-woo. Primero notó la caligrafía redondeada y linda. Luego, cuando vio la lista con números escritos, su boca se abrió. ¿Desde cuándo Eun-woo había tenido esos pensamientos? Quizá llevaba esperando ese momento desde antes de casarse.

 

[1. Villa en Hannam-dong]

 

Su mirada se deslizó inconscientemente hacia la siguiente línea.

 

[2. Casa de campo en Yangpyeong]

 

Sin sentir nada extraño en particular, continuó leyendo la siguiente línea.

 

[3. Terreno en la isla de Jeju]

 

¿Terreno? No era una granja en Jeju ni un lugar para criar caballos, sino un terreno. ¿Por qué iba a pedir un terreno que no valía ni el valor de un solo caballo? Lo correcto hubiera sido pedir uno de los caballos de carreras que estaban cuidando ahí en lugar de un terreno.

 

[4. Apartamento en Haeundae, Busan]

 

Por último, en el número 5 solo se encontraba la palabra ‘Pensión’. No había ninguna cantidad específica ni ninguna otra indicación escrita al lado.

Jin-hyuk se levantó de su asiento y cogió un bolígrafo. Quería preguntar si realmente solo quería eso. Habría sido más comprensible si hubiera pedido un edificio en Gangnam-daero o una mansión en Los Ángeles. Pero, entre todas las cosas que Eun-woo quería, la única con un valor real era la villa en Hannam-dong.

Tras pensárselo un momento, Jin-hyuk escribió al lado de la palabra ‘Pensión’ las palabras ‘2 mil millones +@’. Fue por la frase que estaba al principio de la propuesta de Eun-woo.

Quería un divorcio amistoso, pero preferiblemente mantenerlo en secreto incluso dentro de las dos familias. Había una nota que decía que quería mantenerlo en secreto, incluso para la familia Kang. La propiedad que quería Eun-woo no era un gran problema, ya que podía llamar a un abogado ese mismo día y conseguir que se la transfirieran. Sin embargo, la parte en efectivo requería más atención. La transferencia de grandes sumas de dinero entre ellos podría atraer la atención no deseada.

 

“¿No hay nada más que quieras además de esto?”

 

Los ojos de Eun-woo se abrieron cuando recuperó el papel. No había sabido cuánto pedir, así que había dejado la pensión en blanco, y el había puesto ‘2 mil millones +@’. ¿Quería saber qué más podía querer? ¿Qué más podría darle?

 

“Completaré la transferencia del título de la propiedad propuesta a más tardar esta semana”

 

Cuando Eun-woo no pudo decir nada, habló. Estaba deprimido porque las cosas iban mucho más fáciles de lo que pensaba. Quizás ambos querían el divorcio. Estaba claro que había estado esperando a que Eun-woo hablara.

Quizás el contrato prenupcial en sí mismo representaba los sentimientos de Jin-hyuk. Una indicación de que vivirían como una pareja de escaparate. Parecía ser su voluntad de no involucrarse en ningún asunto, sin importar lo que sucediera. Y debido a que Eun-woo no se dio cuenta de eso, el tiempo pasó de esa manera.

Eun-woo no pudo levantar los cubiertos y solo miró el papel. ¿Realmente fueron felices? La novela terminó con ellos teniendo un hijo y viviendo felices. ¿No era sólo el deseo del autor? Las emociones de Jin-hyuk apenas se describieron en la novela.

La historia se desarrolló desde el punto de vista de Eun-woo. Tras el incidente, Jin-hyuk actuó con responsabilidad. Fue amable con Eun-woo y trató bien al niño. Pero, ¿era eso lo que realmente sentía? ¿No fue su sentido de responsabilidad? Tenía demasiados pensamientos.

 

“El juzgado...”

 

Eun-woo mordió su labio. Tenían que preparar los papeles e ir juntos al juzgado. Eso no acabaría con un intercambio de papeles.

 

“Sería mejor si fuera lo más pronto posible, ¿no?”

 

Asintió con la cabeza ante el tono de voz inexpresivo. Apenas había comido, igual que Eun-woo, como si no pudiera disfrutar de una buena comida. Jin-hyuk se levantó silenciosamente y salió de la habitación. Una vez fuera de su vista, Eun-woo se dejó caer en la silla y se sintió sin fuerzas.

Extrañamente, estar cerca de Jin-hyuk lo ponía nervioso. Aunque era un hombre guapo de manera irreal y definitivamente era el tipo de Eun-woo, también era difícil. Ocho años mayor que él, Jin-hyuk creaba una atmósfera en la que no se atrevía a invadir. A pesar de su buena apariencia, Eun-woo era como el hermano menor de alguien que había vivido veinte años más que él.

Nunca había experimentado dificultades para acercarse a las personas, pero ahora tenía una excepción. De repente, se preguntó cómo era Jin-hyuk cuando se reía.

De repente, recordó la sonrisa en la cara de Jae-min. Su estado de ánimo melancólico desapareció. El bueno, amable, sonriente y cariñoso Jae-min. Ese era él. Mi favorito seguía siendo su amor.

Cada vez que veía a Jin-hyuk, quedaba impresionado por su apariencia, pero lo descarto como la sensación de ver a un famoso al que admiraba.

 

***

 

Jae-min dijo que se pondría en contacto con él cuando los documentos estuvieran listos. Jin-hyuk dijo que fijaría una fecha para ir al juzgado y se lo haría saber. Sin nada más que hacer, Eun-woo fue a la sala y conectó la consola de juegos a la televisión. Cuando le preguntó a Ju-won, éste le dijo que Jin-hyuk volvería a llegar tarde ese día. Debido a eso, Eun-woo envió a Ju-won y a la tía ayudante a casa temprano.

Jin-hyuk no parecía el tipo de persona que tendría problemas con unas cuantas consolas conectadas a un televisor. Probablemente ni siquiera supiera que estaban allí. Así de despreocupado parecía.

Ju-won, que fue obligado a salir del trabajo a las 2 de la tarde, miró a Eun-woo con una mirada extraña, pero no dijo nada y se despidió diciendo que se verían mañana. Después de pensar por un tiempo, Eun-woo eligió frutas deshidratadas en lugar de vegetales frescos como su refrigerio del día.

Jugar solo no era muy divertido. No paraba de cambiar los cartuchos. Al principio fue divertido, pero en un momento dado, a medida que avanzaba por los niveles, su frustración crecía porque no paraba de perder.

Cambió la consola de juegos. Esa se activaba con el movimiento, por lo que tenía que moverse físicamente. Aunque el cielo rojo se desvaneció y se volvió oscuro, Eun-woo estaba enganchado al juego. El juego le hizo olvidar la situación y su actuación. Era una de las desventajas de los juegos.

 

“¡Ah, muévete! ¡Muévete un poco!”

 

Agarró el volante con las dos manos, pero como el coche de delante se negaba a apartarse, Eun-woo gritó con todas sus fuerzas. Cuando giró a la derecha para esquivarlo, el coche giró a la derecha, y cuando giró a la izquierda, el coche bloqueó al que tenía delante por la izquierda.

Cuando el auto se detuvo en medio de la calle, Eun-woo lanzó el volante al sofá y tomó dos fresas secas de la mesa, que se metió en la boca. No se sentía bien tener fresas secas y duras en lugar de fresas frescas y jugosas, se le atascaron en la boca, haciéndolo sentir aún peor.

Después de beber un sorbo de limonada que se volvió aburrida porque todo el hielo se derritió, Eun-woo volvió a agarrar el volante. Tenía una especie de obstinación. Tenía que completar ese juego de alguna manera. Incluso la existencia de Jin-hyuk se olvidó completamente de su mente. Eun-woo, que había vivido con sus padres que trabajaban a tiempo completo, estaba acostumbrado a estar solo.

Y esa familiaridad hizo que olvidara lo más importante. Ya debería haberse dado cuenta, pero jugar durante tanto tiempo se había apoderado de todo su cerebro.

 

“¡Ah! ¡Por qué! ¡Por qué! ¡Por qué, por qué, por qué!”

 

Esta vez, justo antes de llegar a la línea de meta, el auto se detuvo. En la pantalla, su personaje se encontraba deprimido y triste. Eun-woo, enojado, soltó un grito de frustración. Luego, giró la cabeza con una sensación de déjà vu.

En lugar de una maleta, Jin-hyuk llevaba un maletín. Congelado, Eun-woo levantó ligeramente el volante que sujetaba con ambas manos. Las palabras que no había pasado por su cerebro, tan increíblemente estúpidas, saltaron de su boca.

 

“¿Te gustaría intentar?”

 

¿Por qué se le ponía en blanco el cerebro cuando estaba con Jin-hyuk? ¿Por qué esa situación absurda seguía ocurriendo? Eun-woo se paró frente al sofá, juntó sus manos hacia adelante con cortesía y esperó a que Jin-hyuk se acercara al sofá.

Jin-hyuk se quitó la chaqueta del traje elegante y la colocó en el reposabrazos del sofá antes de sentarse. Se sentó y tomó el volante de las manos de Eun-woo. Incluso sin instrucciones, maniobró la consola de videojuegos con destreza y empezó a conducir por la pista que Eun-woo no pudo completar.

Sin embargo, no pareció irle muy bien y acabó corriendo la misma suerte que Eun-woo. Girando suavemente el cuello de un lado a otro, Jin-hyuk se desabrochó las mangas de la camisa y tiró bruscamente de ellas hacia arriba. En ese momento, los ojos de Eun-woo se iluminaron de forma extraña. Tragó saliva al ver los antebrazos tonificados y las venas de Jin-hyuk.

Sí, él había recibido un buff* del autor, por lo que no debería sorprenderse de que fuera tan impresionantemente talentoso. Aun así, ¿por qué Jin-hyuk estaba tan enojado mientras jugaba un juego de coches?

(*N/T: Un buff es un atributo que le ofrece un personaje o a un enemigo un aspecto positivo y que le otorga una ventajas frente a los demás)

La mirada de Eun-woo no estaba en la pantalla del juego, sino en los bíceps de Jin-hyuk. Cuando movía el volante, los músculos se movían en sincronía, lo que hizo que sus labios se secaran.

Ah, ¿era por eso que a Eun-woo le gustaba ese hombre? El tiempo volaba cuando lo miraba.

 

“Toma”

 

Mientras Eun-woo estaba absorto mirándolo, una voz suave se acercó a su oído, haciendo que parpadeara. Jin-hyuk, que estaba sentado en el sofá, ya no estaba ahí. Eun-woo rápidamente levantó la cabeza y lo vio parado frente a él, ofreciéndole el volante.

Eun-woo extendió una mano temblorosa y cogió el volante. Jin-hyuk cogió su chaqueta del reposabrazos del sofá y desapareció en su habitación como si nada.

Eun-woo giró la cabeza hacia la pantalla del televisor y vio a su personaje saltando de alegría.

¿Qué había hecho? Fue pillado otra vez.

Eun-woo, sintiéndose desanimado y sin fuerzas, se dejó caer en el suelo. Menudo juego. Estaba tan distraído que ni siquiera se dio cuenta. No podía hacer una actuación perfecta, pero, ¿cómo pudo equivocarse dos veces en una escena similar? Mañana tendría que salir a comprar un televisor. Tal vez sería mejor si no saliera de su habitación en absoluto.

 

***

 

Tumbado en la cama, Eun-woo sólo podía apretar los ojos y patear la manta que lo cubría con los pies. ¿Cómo pudo pasar eso de todas formas? Al menos racionalizó que la primera vez fue un accidente inevitable, ya que el ruido de la película que se reproducía era alto y él dijo que llegaría al día siguiente.

Pero lo que acababa de ocurrir fue en realidad un gran accidente causado por su propio descuido. Sabía que él vendría y también tenía conciencia de que debía dejar de jugar y entrar a su habitación. Fue ese estúpido deseo de ganar lo que desencadenó el problema.

 

“Sí. Dijo que me daría el divorcio, y el periodo de mediación para un divorcio consensuado es de un mes, así que tengo que aguantarme este año”, se convenció a sí mismo de que podía hacerlo. “Puedes hacerlo. Puedes hacerlo. Lo lograrás”

 

Al principio, habló con confianza de que podía hacerlo, pero gradualmente la voz de Eun-woo se volvió más suave. De repente, la imagen de Jin-hyuk enojado parpadeó frente a él.

El sentido común dictaría que Eun-woo debería haber pasado de largo ante Jin-hyuk, pero él estaba sosteniendo el volante del juego. ¿Cómo podía jugar poniendo cara de estar revisando documentos importantes y vestido de traje?

Eun-woo se mordió el labio, preguntándose por qué quería morder ese antebrazo. Levantó la mano y se golpeó la mejilla. No había podido leer tantas novelas BL últimamente, ¿por eso se le venía a la mente eso ahora?

 

“No, no es así. No, Eun-woo te volviste loco. Tsk. Tsk”

 

En la cabeza de Eun-woo ya flotaban escenas que había leído en libros. Pero, ¿por qué la otra parte era Jin-hyuk y no Jae-min? Debía de estar volviéndose loco. Eun-woo sacudió su cabecita hasta que hizo un sonido de crujido y dio vuelta en las mantas.

Debería dormir. ¿Qué tipo de delirio era ese con alguien que dormía en una habitación tan cerca?

A pesar de sus esfuerzos, Eun-woo no pudo dormir esa noche.

 

“Esto es una locura”

 

Cuando Eun-woo se despertó al día siguiente, se cubrió la cabeza con las manos, sintiéndose culpable. Después de todo, fue Jin-hyuk, no Jae-min, quien apareció en sus sueños y lo hizo sentir aún peor. Pero no hizo nada con él.

No es que hubieran hecho algo juntos, aparte de comer juntos. Eso es todo lo que su falta de imaginación podía crear en su cabeza.

Pero no fue una comida silenciosa y pesada. No recordaba de qué hablaron, pero conversaron y Jin-hyuk sonrió. Desde que se despertó, esa sonrisa no había aparecido en su mente. Pero pensó que él había sonreído. Incluso creyó haber oído su risa.

 

“¿Tiene algún compromiso personal hoy?”

 

Dándose la vuelta en la cama, Eun-woo dejó escapar un largo suspiro ante la pregunta de Ju-won que entraba a despertarlo. En lugar de contestar, consultó su teléfono en la mesita junto a su cama.

 

[¿Quieres quedar para comer?]

“¡Sí!”

 

Cuando se despertó, lo esperaba un mensaje de texto de su favorito, una alegre invitación a comer. Eun-woo asintió y contestó “Sí” sin pensárselo. Eun-woo levantó la vista para decir que tenía una cita, pero sus ojos se clavaron en Ju-won, que lo miraba extrañado.

 

“Tengo una cita para comer”

 

Eun-woo ladeó rápidamente la cabeza y bajó los ojos. No era el momento adecuado para relajarse, pero su verdadera personalidad seguía apareciendo. ¿Debería decir simplemente que se quedaría en la casa de campo de Yangpyeong durante un tiempo?

La casa de campo de Yangpyeong era un refugio para el personaje de Eun-woo. En la novela, era el lugar al que iba después de cada ciclo de celo y cada vez que necesitaba alejarse de todo. Era el único lugar donde Eun-woo podía sentirse seguro, y allí fue cuando huía de Jin-hyuk. Un lugar donde sólo estaban los cuidadores de la casa, una pareja beta.

Parecía que después de presentar los documentos en el juzgado, tendría que quedarse ahí. Si seguía posponiendo y retrasando las cosas, eventualmente sería descubierto y enfrentaría preguntas sobre quién era en realidad.

De repente, Eun-woo se preguntó cuándo sería el próximo ciclo de celo. Levantó la cabeza con ese pensamiento. Al despertarlo por la mañana, Ju-won siempre le daba una píldora con vitaminas parecida a una vitamina. Ese día, Eun-woo recibió cuatro píldoras. Cuando su alergia era grave, tomaba un total de siete, pero ahora que se encontraba mejor, había vuelto a tomar cuatro.

 

“Voy a tomarlas y salir. Por favor, sal tú primero”

 

Las medicinas que había estado tomando sin preguntar parecían extrañas. ¿Por qué estaba tomando tantas pastillas cuando solo tenía veintisiete años? Afortunadamente, Ju-won hizo una reverencia y salió de la habitación. Inmediatamente después, Eun-woo envolvió las pastillas cuidadosamente en un pañuelo.

Ese día, tendría que averiguar más sobre estas pastillas. No podía creer la cantidad de cosas de las que ahora tenía que preocuparse. No ser dueño de su propio cuerpo era realmente incómodo.

 

***

 

Cuando el auto de Ju-won se alejó del lugar acordado para su cita con Jae-min, Eun-woo giró su cuerpo. Buscó en su teléfono celular y encontró una farmacia cercana. Ese día era el día más ocupado para Eun-woo desde que se había posesionado del cuerpo.

Debía encontrarse con Jae-min para almorzar y luego, por la tarde, Jin-hyuk le pidió que fuera personalmente a su empresa. Así que Ju-won le dejó y le dijo que volvería a recogerlo en el mismo lugar a las 2 de la tarde.

Si sus cálculos eran correctos, podría ir al juzgado esa tarde o tal vez mañana. Emocionado por ser libre, Eun-woo abrió la puerta de la farmacia con paso ligero y entró.

 

“¿Cómo sé cuándo debo tomar estos medicamentos?”

 

Eun-woo entregó las pastillas envueltas en un pañuelo al farmacéutico. El farmacéutico lo miró extrañado un momento, pero luego le dijo que esperara un momento y desapareció en la sala de preparación.

¿Serían vitaminas? Aunque parecía que lo cuidaban demasiado. El clima estaba agradable, aunque hacía frío, el sol brillaba. Sería agradable salir a dar un paseo en un día como ese. Siguiendo sus pensamientos, Eun-woo dirigió su mirada hacia el televisor instalado en la farmacia.

Parecía haber sido colocado para entretener a los visitantes. En la pantalla, coloridos personajes reían y saltaban mientras transmitían sueños y esperanzas. Las comisuras de los labios de Eun-woo se elevaron lentamente.

 

“Cliente”

 

Dijo el farmacéutico, interrumpiendo la ensoñación de Eun-woo. Después de mirar fijamente la televisión por un rato, Eun-woo volvió a mirarlo.

Luego de salir de la farmacia, Eun-woo se tocó los labios con las yemas de los dedos y se dirigió al lugar de su cita con Jae-min. ¿Por qué había tantas cosas ocultas? Él es solo un personaje de novela, un lindo personaje con una personalidad algo melancólica y enigmática.

‘Pastillas para regular el ciclo de celo. Vitaminas. Medicación para la presión arterial baja’

Las palabras del farmacéutico resonaban en sus oídos. Vitaminas. Lo entendía. Todo el mundo las tomaba últimamente. Reguladores del ciclo de celo. También lo entendía. Aunque aún no había sentido ninguna diferencia en particular, era un omega, después de todo. Pero ¿un medicamento para la presión arterial baja?

¿Qué tipo de enfermedad crónica era esa, que requería tomar medicamentos de por vida a tan temprana edad? ¿El escritor no estaba satisfecho con su apariencia frágil, delgada y propensa a desmayarse? ¡Y ahora le estaba dando directamente una enfermedad a su hijo!

Le costaba levantarse por las mañanas, ¿pero no era sólo porque se acostaba tarde todos los días? Ahora que lo pensaba, cuando se levantaba de golpe, a veces se sentía un poco mareado. A veces, si corría mucho, su energía se agotaba rápidamente y tenía que acostarse. En cualquier caso, suspiro al darse cuenta de que ahora tenía una carga adicional que llevar de por vida.

Ya había recibido un diagnóstico de alergia al huevo, por lo que la presión arterial baja no podía afectar la resistente mente de Eun-woo ni un poco.

 

“Aigoo, a partir de mañana debería hacer ejercicio o algo así. No parece que vaya a vivir una vida sin enfermedades con este cuerpo”

 

Eun-woo llegó a una conclusión positiva y dio un paso adelante. Tenía mucho dinero, pero lo gastaría todo antes de morir. Aún no había tenido la oportunidad de gastarlo adecuadamente. Tenía demasiado por hacer y no quería enfermarse.

En ese momento, Ju-won observó a Eun-woo desde el otro lado de la calle. De repente, el joven maestro al que estaba sirviendo de repente cambió como si fuera otra persona. Ya hacía casi cuatro años desde que lo vio de cerca por primera vez. En cuanto Eun-woo se casó, se quedó a su lado. Oficialmente, él era su secretario, pero en realidad su trabajo consistía en vigilar y proteger a Eun-woo.

Se suponía que debía protegerlo del peligro, pero en realidad estaba informando sobre su vida. Eun-woo era frágil, tranquilo y lloraba mucho. Despertarlo debido a su dificultad para levantarse debido a su presión arterial baja y asegurarse de que comiera tres comidas al día era todo lo que hacía. Aparte de los asuntos oficiales, rara vez salía, por lo que no había nada que informar.

La rutina diaria de Eun-woo era bastante simple. Levantarse a las 8am. Desayuno a las 8:30. Almuerzo a la 1pm. Cena a las 6pm. Después de desayunar, salía al jardín a las 9am y se quedaba en él hasta la 1pm. Limpiaba las violetas, se sentaba en una mecedora en un lugar soleado y miraba por la ventana.

Después del almuerzo tomaba una siesta corta. A veces veía la televisión en la sala, pero sólo las noticias. Incluso cuando la televisión estaba encendida, no prestaba atención a nada más que a las noticias; simplemente la encendía y se perdía en sus pensamientos.

Cuando él comenzaba a cenar, Ju-won regresaba a casa. Luego la tía también terminaba de limpiar los platos que él había comido y se iba a casa.

La conversación entre ellos también era simple. Eun-woo sólo tenía una pregunta: sobre la agenda de Jin-hyuk. Entonces Ju-won le decía exactamente cuál era la agenda de Jin-hyuk, incluyendo adónde iba si viajaba por negocios, y cuántos días estaría fuera. Eun-woo asentía con la cabeza. Así había sido Eun-woo durante los últimos cuatro años.

Incluso cuando salía del baño, Eun-woo solía vestirse completamente y secarse el cabello sin mostrar un aspecto desaliñado. Pero un día, de repente, comenzó a pasear con un pijama de seda. Las gotas de agua que caían de su cabello teñían el pijama de seda con un color oscuro.

Solía levantarse tranquilamente cuando lo despertaba, pero un día comenzó a hacer berrinches y se negaba a levantarse. A veces, incluso lo miraba fijamente a los ojos. Lo más sorprendente de todo era que salía a comprar solo. Aunque antes las cuidaba con mucho cariño, él ni siquiera se les acercaba y ahora era Ju-won quien les daba agua y limpiaba las hojas de las violetas.

No sabía qué hacía cuando lo dejaba salir temprano del trabajo. No salía de casa, pero ¿qué hacía solo? Solía evitar comer bocadillos, pero ahora masticaba verduras crudas y comía frutas deshidratadas.

Había demasiados cambios y no sabía por dónde empezar ni qué informar. Y ese día, lo había dejado atrás y se había ido solo a la farmacia. Al ver que Eun-woo había entrado en el restaurante donde había quedado con Jae-min, Ju-won movió el coche y paró en la farmacia que acababa de visitar.

Eun-woo comprobó su medicación. No había razón para que no supiera qué medicinas estaba tomando, ¿por qué tenía que verificarlas?

Sólo cinco personas sabían que eran una pareja de escaparate. Eun-woo, Jin-hyuk, la tía, él mismo y el asistente de Jin-hyuk. Y tanto Jin-hyuk como Eun-woo estaban tomando reguladores de feromonas. Medicamentos innecesarios para una pareja. Con ese ajuste, cuando llegaban los ciclos regulares de celo y RUT, cada uno pasaba su tiempo en un espacio designado.

Jin-hyuk, que nunca antes había llamado a Eun-woo a su despacho, le había llamado ese día a su oficina, y estaba claro que algo estaba cambiando entre ellos.

 

***

 

Eun-woo estaba sentado en silencio, jugueteando con su taza de café. Había muchas cosas que quería decir y muchas cosas que quería preguntar, pero era todo lo que podía hacer en ese momento. Después de una comida con poca conversación, se fueron a un café cercano.

 

“Parece que hoy no puedes comer mucho. ¿Pasa algo?”

“Hablé con Jin-hyuk y llegamos a un acuerdo”

“¿Estás bien?”

 

Ante la callada respuesta de Eun-woo, Jae-min extendió la mano. Su mano que rozaba ligeramente el dorso de su mano sosteniendo la taza de café se alejó rápidamente. Parecía que claramente quería reconfortarlo. Eun-woo no respondió, en cambio, sonrió.

Estaba bien. Realmente bien. Estaba locamente bien. Era tan feliz. Tan feliz al punto de enloquecer, y era doloroso el no poder expresarlo.

 

“Tengo todo el papeleo listo. ¿Puso Jin-hyuk alguna condición?”

 

Todo sucedía tan naturalmente, como el agua. Eun-woo habló despacio. Le habló de la propiedad que le había ofrecido y de que había añadido arbitrariamente 2.000 millones a la pensión.

Añadió que habían decidido mantener su divorcio en secreto durante al menos dos años. Eso significaba que, al menos durante dos años, Jin-hyuk y él seguirían siendo una pareja del mundo del espectáculo. Tenían que asistir juntos a los eventos y participar en los asuntos domésticos del otro.

Sabía que no podía cortar todo limpiamente, y también era su oferta para tener tiempo para adaptarse a ese lugar.

 

“Por qué...”

 

Una expresión de sorpresa cruzó brevemente el rostro de Jae-min. Quería decir algo como: ‘No es necesario llamar la atención de las personas al divorciarte abiertamente’, pero en lugar de eso se limitó a sonreír. Seguramente sería una pregunta sobre ese extraño período de dos años, pero él no siguió hablando.

No sabía cuánto duraría esa farsa, pero no quería que Jae-min lo descubriera, aunque lo descubriera Jin-hyuk. Quería seguir siendo el Eun-woo que amaba. No podría ocultar su verdadero yo para siempre, pero quería acostumbrarlo lentamente de él, como sumergirlo lentamente en la lluvia fina y mojarlo poco a poco.

 

“¿Estás pasando por un momento difícil?”

 

Jae-min eligió sus palabras con mucho cuidado. La calidez de sus ojos lo decía todo, y su sonrisa era alentadora. Aunque la situación no era realmente difícil, le reconfortó enormemente. Estaba deseando terminar pronto y ser libre.

 

“Dijiste que tenías que ir a ver a Jin-hyuk de inmediato”

 

Colocó un sobre sobre la mesa. El sobre contenía los documentos que Eun-woo quería. Eun-woo contestó brevemente a la llamada de Ju-won y le dijo que saldría en un minuto y cortó la llamada. Era hora de ir a ver a Jin-hyuk.

 

“Kang Eun-woo”

 

Eun-woo se levantó de la silla para decirle a Jae-min que tenía que irse. Pero se detuvo repentinamente y giró la cabeza para mirar a Jae-min. A veces, durante sus conversaciones, usaba un lenguaje más informal. Pero era la primera vez que lo llamaba por su nombre. No dijo nada más, solo lo llamó por su nombre.

 

“Eun-woo”

 

¿Había escuchado mal? Eun-woo volvió a detenerse mientras se movía.

 

“Si presentamos los documentos en el juzgado, les darán un período de gracia de un mes. Y si van juntos al juzgado de nuevo, serán completamente libres. ¿Entiendes lo que eso significa?”

 

Las miradas de Eun-woo y Jae-min se entrelazaron. La mirada de Jae-min, detrás de sus gafas de montura metálica, cautivó a Eun-woo. Con voz tranquila y suave, Jae-min explicó calmadamente.

 

“El día de la sentencia definitiva, ¿puedo ir a buscarte?”

 

Desde el momento en que sus miradas se encontraron, el corazón de Eun-woo comenzó a latir lentamente. No latía rápidamente, sino más bien lentamente. Cuando Jae-min terminó de hablar, Eun-woo sintió como si su corazón se detuviera. Ni siquiera pudo parpadear.

 

“Permíteme ir a buscarte. Eun-woo”

 

(Crack). El sonido de un sobre arrugándose resonó cuando el sobre en la mano de Eun-woo se apretó. Apenas pudo evitar su mirada y bajó la cabeza. Podía oír su corazón palpitando en sus oídos. Esta vez, latía tan rápido que le dolía la cabeza. Sin poder decir nada en respuesta, Eun-woo huyó de allí.

Eso era realmente injusto. ¿De dónde salió esa apariencia tan repentina? En serio, Kim Jae-min era realmente genial. Se enamoró de él una vez más. Sólo debía esperarlo. Sería libre de ir a buscarlo. Aunque no podían tener una relación abierta, seguramente podían ser amigos cercanos, ¿no? También quería tomar su mano una vez, y fingir un error, abrazarlo una vez...

En ese momento, había demasiados ojos observándolos. Eun-woo era demasiado ingenuo para tener una aventura descarada.

Entró en el ascensor y se llevó las manos a las mejillas acaloradas. Las comisuras de sus labios se levantaron y las arrastró hacia abajo con las yemas de los dedos. Quería gritar que quería encontrarse con su esposo y dirigirse inmediatamente al juzgado.

 

“Me apresuraré un poco para no llegar tarde”

 

Ju-won se reunió con ellos fuera del café y les dirigió una mirada severa. Luego, mientras Eun-woo se abrochaba el cinturón en el asiento trasero, él se alejó. Eun-woo miró su reloj y frunció el ceño. No estaba tarde. No era probable que hubiera mucho tráfico a esas horas y la empresa de Jin-hyuk estaba a la vuelta de la esquina.

 

“¿A dónde estamos yendo ahora?”

 

Eun-woo había buscado la ubicación de la empresa de Jin-hyuk a través de una búsqueda, pero el automóvil pasó directamente por delante de la empresa.

 

“El director dice que se verán en el juzgado”

 

Ante la mención del juzgado, Eun-woo miró el sobre que tenía a su lado, y se sintió raro al pensar: ‘Esto es un verdadero divorcio’. No eran un matrimonio de real, y no tenía ningún sentimiento especial hacia Jin-hyuk, pero, literalmente, se sentía extraño.

 

***

 

Hyun-soo estaba siendo cuidadoso con la apariencia más oscura y afilada de Jin-hyuk de lo habitual. Pero no pudo evitar cuestionarse lo que acababa de oír. Odiaba decir lo mismo dos veces, pero eso era algo que necesitaba confirmar nuevamente.

 

“Has oído bien, quiero que todas las propiedades de las que te acabo de hablar sean transferidas a Eun-woo, y quiero que te tomes una hora libre en el trabajo esta tarde”

“¿Están divorciándose?”

 

Hyun-soo se volvió hacia Jin-hyuk, que miraba concentrado en su tableta sin mirarle a la cara, y eligió palabras que no había pronunciado.

 

“Asegúrate de que los periodistas no divulguen noticias antes que cualquier otra cosa. Ya que me pidió que lo evitara, lo menos que puedo hacer es eso”

 

Seguía sin mirar a Hyun-soo, pero éste se acercó innecesariamente y le tocó el cuello de la camisa. Miró por la ventana un momento y se pasó una mano por el pelo, pero la sensación de incomodidad no desapareció.

 

“¿Por qué?”

 

Hyun-soo no usó formalidades en su forma de hablar.

 

“Porque Eun-woo lo quiere”

“¿Tiene sentido pedir un divorcio después de cuatro años? ¿Están tratando de encubrir esto en secreto? ¿Así que ya han llegado a un acuerdo y van a presentar los documentos en el tribunal hoy?”

 

La voz de Hyun-soo se hizo más fuerte al oír esas palabras. Ya no hablaba como un secretario a su jefe, sino como su amigo de más de 30 años.

 

“Baja la voz. Es una empresa, y Eun-woo viene por separado. Aún no se ha filtrado ninguna noticia, así que los periodistas no nos seguirán. Pero, aun así, debemos tener cuidado”

“¿Por qué? Han estado viviendo así durante cuatro años, ¿por qué ahora?”

“Porque Eun-woo lo quiere”

“Estás loco. Has perdido la cabeza. ¿Qué tipo de relación tienes con él?”

 

Las palabras de Hyun-soo le tocaron una fibra sensible y Jin-hyuk apartó la mirada de la tableta para mirarle. ¿Cómo podía describir su relación con Eun-woo? Eran peor que una pareja de escaparate.

Podrían estar casados sobre el papel, pero cuando lo veía, se aterrorizaba y huía. No podía vivir así toda su vida, y cuando tomó la decisión, pensó que era mejor hacerlo de manera definitiva. Si hubiera habido alguna otra razón, podría haber preguntado más sobre sus pensamientos y haber tenido una conversación. Pero cuando le dijo que quería vivir, significaba que estar con él era igual a estar muerto, ¿qué clase de afirmación era esa?

No pudo persuadirlo ni retenerlo. Era alguien que quería vivir y él lo dejaría.

 

“Bueno, si vas a hacerlo, hazlo bien. ¿Qué es esto, un juego de niños?”

 

Tal y como Jin-hyuk pensó al principio, Hyun-soo estaba mirando los listados de propiedades y chasqueando la lengua.

 

“Lo quiero. Pero primero, no debemos llamar la atención con el dinero en efectivo. Y en el transcurso de este año, deberemos dar un poco más”

 

Hyun-soo se sentó en el sofá y aflojó su corbata, desabrochando los botones de su camisa.

 

“Ah, ¿debería hablar con Eun-woo en serio? ¿Qué diablos estás pensando? Dejar a Eun-woo así. ¿No dijiste que estabas bien? Que Eun-woo era lindo. ¿Eh?”

 

Hyun-soo, que lo sabía todo sobre su relación, estaba frustrado. Ninguno de los dos hacía ningún esfuerzo. Uno se escondía y el otro solo miraba. Deberían haber hecho un esfuerzo, aunque fuera un poco. Incluso la separación había sido fríamente distante. No habían experimentado ni siquiera una pequeña pasión.

 

“Hyun-soo, sólo despeja una hora por la tarde. Tengo que ir al juzgado. Quiero terminarlo este año”

 

Hyun-soo sin decir una palabra, arregló su desordenada apariencia y, tan pronto como salió de la habitación, tomó su teléfono móvil y llamó a Ju-won. Sentía que tenía que resolver esas frustrantes cuestiones de alguna manera.

 

“Jin-hyuk. ¿Qué le pasa a este chico?”

“Aquí también está bastante mal”

 

En cuanto Ju-won cogió el teléfono, Hyun-soo suspiró ante las duras palabras que le respondió. No quería involucrarse en los asuntos familiares de un conocido. Lo había sabido todo el tiempo, fingió no saberlo y supuso que eran sus vidas, pero eso no era realmente así.

 

“¿Vas al juzgado esta tarde?”

“El papeleo está listo”

 

Como buen oyente que era, Hyun-soo se dirigió a su coche en el aparcamiento subterráneo y oyó algo que no pudo creer de Ju-won.

Resultó que fue Eun-woo, y no Jin-hyuk, quien preparó los papeles del divorcio. Era difícil que lo hiciera solo, y quedó claro que había utilizado a Jae-min, a quien conocía, para hacerlo. Lo importante era que había una persona más que conocía su secreto.

 

“¿Crees que esto tiene sentido?”

“Eun-woo ha cambiado, y no sé si siempre ha tenido esa personalidad o si algo ha cambiado en él, pero creo que una de las razones del cambio es el divorcio, porque surgió al mismo tiempo que yo lo vi actuar raro”

 

Hyun-soo hurgó en su bolsillo al escuchar el inusual y rápido discurso de Ju-won. En lugar de su cigarrillo habitual, sacó un caramelo de menta del bolsillo y se lo metió en la boca.

 

“Hoy recibí una la lista de bienes raíces y me pidieron que realizara un cambio de titularidad”

 

Tenía un caramelo en la boca, así que su pronunciación era un poco confusa.

 

“Si eso es lo que te han pedido, entonces ellos dos ya tienen un trato”

“Así que le iba a dar algo, debería pedir un edificio en Cheongdam-dong o algo que valga dinero. ¿Qué es esto? Solo una villa en Hannam-dong era aceptable desde el punto de vista humano. ¿Para qué demonios necesita un territorio en la isla Jeju? ¿Por qué no pide el rancho de caballos de allí? ¿En qué está pensando Eun-woo?”

“No lo sé porque no habla”

 

No importaba cuánto hablaran, no obtendrían ninguna respuesta. Pero no creía que se divorciaran. Harían todo lo posible para evitar que se difundiera en los medios, pero no había secretos eternos. Si esa información llegara a los medios, habría demasiadas implicaciones, desde la sacudida de las acciones de ambas empresas hasta otras consecuencias.

 

“¿Por qué Eun-woo le tiene tanto miedo a Jin-hyuk?”

 

Tras un largo silencio, Hyun-soo habló. Nunca había visto sonreír a Eun-woo cuando estaba con Jin-hyuk. En realidad, nunca había visto a Eun-woo sonreír en absoluto.

 

“Eso es mentira. Eun-woo ama a Jin-hyuk”

“¿De qué estás hablando? A Eun-woo no le gusta Jin-hyuk”

 

Decían cosas diametralmente opuestas sobre el mismo tema.

 

“Espera un minuto. Déjame hablar primero y escucha bien. A Eun-woo le gusta Jin-hyuk. Es tímido y no puede expresarse adecuadamente, pero realmente le gusta. Cuando lo ve, agacha el cabeza avergonzado, y cuando lo mira, no es más que un adolescente completamente enamorado por primera vez. Mañana y noche, se pega solo a la ventana y le observa en secreto mientras él va y viene del trabajo. En realidad, es Jin-hyuk quien descuida a Eun-woo”

 

Ju-won habló con la mayor sinceridad que había sentido nunca. La expresión de la cara de Eun-woo cuando le preguntaba por el horario de Jin-hyuk era indescriptible. Cuando le decía que se quedaría en corea mucho tiempo, Eun-woo sonreía levemente y sus mejillas se sonrojaban. Por otro lado, cuando se enteraba de que él iba a estar en el extranjero durante un mes o así, se volvía sombrío.

Sus hombros pequeños se encogían aún más, y si fuera un animal con orejas, seguramente las puntas de sus orejas caerían hacia abajo. Si Jin-hyuk lo esperaba para desayunar, pasaba más tiempo del habitual en el espejo arreglando su atuendo.

Las palabras de Ju-won dejaron a Hyun-soo sin palabras. Por muy unidos que fueran Hyun-soo y Ju-won, en realidad no habían tenido ninguna conversación sobre Jin-hyuk y Eun-woo. Objetivamente, Hyun-soo pasaba mucho tiempo con Jin-hyuk, y era seguro decir que Ju-won pasaba todo el día con Eun-woo, así que era natural que defendiera a la persona con la que era cercana.

¿Eun-woo no le tenía miedo a Jin-hyuk? Sinceramente, Hyun-soo pensaba que sí. Eun-woo siempre parecía tener miedo de Jin-hyuk en varios lugares de eventos. Le daba pena cuando lo veía sobresaltarse con el mero roce de la mano de Jin-hyuk en su hombro, pero no fue porque no le gustara, sino porque le gustaba mucho...

 

“Es solo un problema de comunicación”

 

Ju-won y Hyun-soo llegaron a la misma conclusión. Cada uno percibía al otro a través de sus propios marcos. Para Eun-woo, ocho años más joven, Jin-hyuk era un objeto de admiración y quizá demasiado grande para él. Por otro lado, Jin-hyuk, ocho años mayor, mostraba una consideración excesiva hacia el joven Eun-woo. Y ese problema había creado malentendidos y confusiones enormes.

 

“¿Deberíamos encontrarnos así en el juzgado tal y como está la cosa?”

 

Ante las palabras de Ju-won, Hyun-soo mordisqueó el caramelo de menta que se había vuelto más pequeño. Parecía que tenían que establecer una comunicación más profunda y humana, ya fuera verbal o física, entre ellos, incluso si era a la fuerza.

 

“¿Cuánto tiempo es el período de mediación para el divorcio de mutuo acuerdo?”

“Un mes”

 

Tan pronto como Hyun-soo preguntó, Ju-won se apresuró a responder.

 

“Un mes, es suficiente”

 

Y ambos continuaron conversando durante mucho más tiempo.

CRÉDITOS

TRADUCCIÓN: Ciralak

CORRECCIÓN: Pix

Anterior | Lista de Capítulos | Siguiente