Capítulo 12 - ¿Puedo atacarte?
'El propósito es…´
Eso, fue correcto. A menos que se declarara colusión con potencias extranjeras, no había razón para comenzar una guerra.
"Bueno, por la razón que sea, aquellos que crearon esta situación deberían ser asesinados”.
“¿Oh? Por alguna razón, estamos de acuerdo".
El Duque Lasti sonrió y me entregó una nueva copa de vino. Habiendo chocado nuestros vasos por un corto tiempo, evitó el asunto. Después de beber vino, pensé en un propósito plausible, pero negué con la cabeza porque era un propósito tan ridículo.
“Como era de esperar, ¿no es así?”
"¿Dónde está su pareja? ¿Está sola, condesa?"
“Estaba ocupado, es por lo que estoy aquí primero".
Las sonrisas de los que me rodeaban se hicieron aún más profundas. Dejé mi copa de vino y les dediqué la misma sonrisa. Ahora no era el momento de estar pensativa.
Por cierto, no esperaba verlos aquí en el baile".
“Bueno, nos gustan las reuniones tranquilas, pero es bueno ir a un baile como este de vez en cuando”.
Me gustan las cosas tranquilas, maldita sea.
Las reuniones son diferentes a estos bailes, ya sean reuniones nocturnas o fiestas de té con grupos de mujeres. Aún mejor si era un lugar con problemas que no se revelaban al mundo exterior. Como no muestro mi rostro en la fiesta del té y llamé la atención en el baile, muchas personas se reunieron a mi alrededor.
“Por cierto, Condesa. El baile que tuvo con el Duque antes fue realmente hermoso. En realidad, soy un poco torpe bailando a ese ritmo. Considero que… influye mucho la pareja".
"Jaja, soy un poco buena bailando".
“De verdad pienso que le gusta mucho la danza. Bailaron dos canciones seguidas".
“Estuve hablando con el Duque por un tiempo, así que perdí la oportunidad para dejarlo. No fue intencional".
"Hoho, no hay necesidad de poner excusas. ¿No lo creen todos?”
Traté de ocultar mi brillante sonrisa y puse una sonrisa problemática. Aun así, no esperaba que fluyera tan fácilmente como quería.
‘Ni un tonto es tan malo como este tipo’.
¿Necesitas demostrar que estás tratando de llamar la atención de los demás gritando en este momento? Era evidente la malicia. La condesa Saila, que se había estado escondiendo detrás de los demás, finalmente habló.
"Hoy, condesa, está muy hermosa".
"Así es. Especialmente ese collar. Lo compró en la joyería de Arzen, ¿verdad? No solo eso, sino que escuché que sólo compró los accesorios más caros del lugar".
"La joyería de Arzen en sí es originalmente propiedad de Erten".
“… Ah, ¿es así?”
"Sí".
La Condesa Saila desdobló su abanico para tapar su sonrisa enredada.
"Entonces, estoy realmente celosa. Mi familia no tiene una joyería".
"Incluso si no tienes una joyería, puedes comprar lo que quieras, ¿no es así?"
Como dicen los rumores, la Condesa Saila era de una familia rica. El collar que colgaba de mi cuello originalmente se vendía solo a VIP, y para convertirse en VIP, debía tener un alto rendimiento de compras. Por eso, la condesa Saila gastó mucho dinero.
“Bueno… Incluso hay cosas que no puedo obtener".
La mirada de la Condesa Saila estaba claramente dirigida hacia mi collar. Incluso yo no podía decir si no tenía la intención de ocultar que lo estaba codiciando o si simplemente no podía manejar la mirada.
“Hoy, la Condesa está absolutamente perfecta. Tanto en su vestimenta, como en joyas y pareja".
“Es un cumplido exagerado. Me avergüenzo".
"No esperaba que la esposa del Conde asistiera a la fiesta con el Duque. ¿Llegó a conocerlo por separado?"
"Me encontré con el Duque varias veces cuando se quedó en nuestro territorio, y recibí una solicitud para ser su compañera en la reunión de la noche hace unos días. Supongo que su prometida no se siente bien últimamente. Bueno, incluso para mí, estaba feliz de aceptar la solicitud de una persona que fuera mi conductor, últimamente estoy muy sola".
“Solo usted vino a la capital, ¿verdad? Disfruta de ir a bailes todas las noches y, por supuesto, también de la tranquilidad de estar acompañada por un caballero. Bueno, incluso si estuviera en su posición, creo que el Duque sería mucho mejor que su esposo".
"¿Qué quieres decir? Si mi esposo hubiera estado conmigo en la capital, por supuesto que habría asistido con él”.
“No tiene que decir eso. Después de todo, todos sabemos que su esposo ni siquiera viene a la capital, y mucho menos a una socialité”.
“… Condesa, será mejor que se detenga. No es una historia muy interesante”.
"Entonces, ¿hablamos de algo divertido?"
"Sí, me encantaría. Por favor".
Más eufórica por la última súplica, la Condesa Saila se adelantó para acercarse a mí. Mientras agitaba su abanico, puso los ojos en blanco como si pensara en algo realmente interesante.
"Entonces, ¿conoce la vieja historia que flota en los círculos sociales en estos días?"
"¿Una vieja historia?"
"Sí, es una vieja historia sobre una hermosa doncella en un pueblo que se casó con una bestia. ¿La historia se llamaba La Bella y la Bestia?"
“… Ya veo. Pero, ¿qué pasa con esa historia?”
“Las personas que se enamoraron de su belleza dicen que usted, Condesa, es la Bella de la historia, y que el Conde Marcado le hace frente a la misma".
'Oh, esto me está haciendo enojar’.
Sabía que las palabras 'La Bella y el Conde marcado' saldrían de la boca de la condesa Saila. Incluso si son simples rumores de bajo nivel, información es información. Por eso ya lo sabía. Fue algo que induje, pero no pude evitar enojarme. Dejé caer la copa de vino que sostenía. El vino manchó a la condesa Saila y a mi vestido, luego cayó y se hizo añicos. Agarré su barbilla mientras ella entraba en pánico.
"¡Oh Dios mío!"
"¿Qué acaba de decir, condesa?"
El miedo estaba en los ojos de la condesa, quien fue levantada con mi barbilla sujeta. Debe ser por el poder de mis manos, que es difícil pensar que son las de una mujer. Miré sus ojos asustados.
***
“¿No se lo dije cuando la conocí? No importa cuán incómodo esté el cuerpo, no importa cuán grande sea la cicatriz, esa persona nunca es fea o lamentable. Entonces, no es correcto usar una palabra que denigre a esa persona. Obviamente le enseñé de esa manera, pero no lo aprendió".
“A-ah…”
“Además, señora, le di la oportunidad de detenerse. ¿No sabía que la palabra 'por favor' estaba destinada a usted?”
La voz de Belita era baja y tranquila, pero todos la escuchaban. Joshua se cruzó de brazos y observó la situación. Sus ojos azules atrajeron a todo el salón de baile al mar profundo y frío. La condesa temblaba, abrumada por sus ojos jóvenes.
“¿Cree que no sabía sobre ese rumor? ¿Cree que Erten no estaba al tanto del humilde apodo de Conde Marcado? Es solo que no me molesté con eso. Supongo que no has aprendido la misericordia implícita de no tener que hacer escándalo delante de un Erten".
“Eso…”
“Por supuesto, aunque sea solo un simple Conde, Erten es uno de los cinco nobles más grandes. Sin embargo, no puedo creer que usted haya hecho comentarios tan insultantes frente a mí. Su lengua es realmente inútil en comparación con lo que le han educado".
"Oh, por favor, perdóneme".
“Tengo que sacarte la lengua para perdonarte, ¿estarás bien?”
Ante las palabras de Belita, la condesa Saila mantuvo la boca cerrada. Al ver eso, Belita sonrió tan brillantemente como siempre.
“Claramente no puedo hacer eso. ¿Cómo podría hacerle algo tan maligno? Es terrible solo pensar en eso".
‘Decir algo así con una sonrisa no es nada convincente’.
Por supuesto, sabía que Belita estaba diciendo estas palabras a propósito para aumentar el miedo. Al ver la brillante sonrisa en su rostro, Joshua se dio cuenta de que su verdadero propósito no era causar conmoción, sino advertir a las personas en el mundo social.
“Bueno… No puedo simplemente perdonarla. Realmente no sacaré su lengua, pero la castigaré por eso. En el futuro, no vuelva a burlarse con esa lengua en el mundo social. A menos que sea un saludo formal que no se pueda evitar, no dejaré que ningún rumor misceláneo salga de su boca. Ya sea en una fiesta de té o un baile. Recuerde, Erten lo sabe todo".
La advertencia de que si volvían a llamarlo ‘Conde Marcado Erten’ no se quedaría de brazos cruzados. Decir que Erten lo sabía todo era un temor seguro para quienes sabían de qué se encargaba Erten entre los Cinco Nobles.
“¿Entiende, señora?”
Si la Condesa Saila aceptaba el castigo, no podría acercarse a la sociedad en el futuro. A medida que la situación se fue calmando, intervinieron personas que estaban en silencio y observando.
“Cálmese, señora. Sé que está enojada, pero es demasiado…”
"¿Demasiado?”
Sus ojos regresaron de nuevo. Sin embargo, la alegría de matar a su presa todavía estaba allí.
"Ya la soporté una vez. Además, incluso le enseñé con palabras amables. Lo que está bien y lo que está mal. Que hay una línea que no se debe cruzar. Pero no parecía entender, así que cambié la forma de hacerles saber. ¿Aun así cree que es demasiado?”
“Ja, pero si este caso se vuelve demasiado grande, el Conde Erten se sentirá muy decepcionado…”
“Eso no es verdad".
La voz que intervino en el medio no era la de Belita. Una voz baja y tranquila. Tan pronto como escuchó la voz, Belita soltó a la Condesa Saila. La condesa Saila cayó como estaba, golpeándose las nalgas.
“No me decepcionó particularmente. Más bien, creo que me enamoré de mi esposa una vez más por regañar a una persona mala”.
A través de la multitud, un hombre se acercó a ella. Frac y pelo negro. Era como si estuviera envuelto en la oscuridad, como si nadie lo notara entre la multitud. Y la máscara blanca contrastante llamó la atención de las personas.
NT: Frac es una especie de traje para hombres.
"Cómo llegaste aquí…”
“Te extrañé, Bel”.
“… Yo también".
Tal vez le gustó su respuesta honesta, Ian sonrió y estiró su mano. Joshua pensó que incluso le estaba dando un abrazo, pero sorprendentemente, desató el broche de su collar. Luego lo arrojó frente a la condesa Saila y dijo:
“¿Por qué no me dijo que quería esto? Condesa Saila, Podría habérselo dado si me lo hubiera pedido. En el futuro, nunca más podrá obtener privilegios VIP en la joyería de Erten. En compensación le daré este collar. Le obsequiare a mi esposa mejores cosas".
***
"Está arruinado".
Joshua suspiró y sacudió la cabeza. Este caso estaba destinado a mostrar que Belita estaba atrapada en un asunto personal y no podía darse el lujo de preocuparse por la reconciliación entre Erten y Zoran. Sin embargo, dado que Ian, el Conde de Erten, había venido personalmente, fue inútil.
‘Sin embargo, fue un espectáculo divertido de ver personalmente. Se me ocurrió una buena idea’.
Pensó una manera de llevar los chismes sobre Belita, Ian, Levenna y Joshua debajo de la superficie. Joshua sonrió y se acercó a la pareja que estaba en su propio mundo.
“Ha pasado un tiempo, Conde Erten".
"Sí, mucho tiempo sin verlo".
“Llegó a la capital en el momento adecuado. Ahora que la Condesa y yo hemos establecido el proyecto hasta su finalización, todo lo que tenemos que hacer es hacer una revisión final y sellarlo. Me disculpo una vez más por hacer que ustedes dos vinieran a la capital debido a una circunstancia inevitable”.
“… Está bien. Ambos estamos ocupados. Es por lo que no pude venir antes y envié primero a mi esposa a la capital, ¿no es así?”
“No, estaba realmente impresionado con las habilidades de la Condesa. Me hace pensar que es un mejor socio comercial que cualquier otra persona que haya visto”.
“Bel es la persona más inteligente que he visto en mi vida. Luego nos reuniremos y finalizamos el contrato más tarde”.
"Sí, me pondré en contacto contigo más tarde".
Joshua se acercó a él primero, e Ian lo tomó sin dudarlo. Después de darle la mano, Ian tomó la de Belita sin dudarlo y se fue. Joshua miró a la condesa Saila. Debe haber sido un gran shock, pero tenía una expresión en blanco en su rostro, sin pensar en levantarse.
“Condesa, la ayudaré a levantarse. ¿Quiere tomar mi mano?”
“… Sí".
Joshua la levantó y la agarró por los hombros.
“Condesa, Ian es en realidad mi amigo de la infancia. Es cierto que hubo eventos desfavorables por circunstancias familiares cuando yo era joven, pero eso no cambia que Ian es mi mejor amigo”.
“…”
“Así que, si vuelve a insultar a mi amigo, no se lo perdonaré. No se lo perdonaré a nadie".
Después de preguntar por ella a la señora que estaba cerca, Joshua salió del salón de baile. El organizador del baile calmó a la gente y dejó que la música volviera a fluir. Al ver a los dos caminando uno al lado del otro en la distancia, Joshua comenzó a extrañar a una persona con locura.
“Ravea…”
Ya era medianoche, por lo que hubiera sido mejor conocerla mañana, pero Joshua planeaba ir a verla ahora mismo. Después de todo, esconderse en el Marqués de Hiszen era algo que había estado haciendo desde que era un niño, tan natural como respirar.
Podía cambiarse en el carruaje.
Joshua subió al carruaje y se puso los zapatos que había escondido en la esquina del carruaje. No importaba si la ropa era un poco incómoda, pero los zapatos lo eran porque había riesgo de ser atrapado por el fuerte sonido de los pasos. Mientras se acercaba al marqués de Hiszen, Joshua golpeó dos veces la pared del carruaje.
Aprovechando la repentina desaceleración del carruaje, Joshua saltó de él. Un poco más allá, había un pasadizo secreto que conducía al jardín del Marqués, un lugar que solo Joshua juró conocer.
Después de atravesar los arbustos, movió la puerta oculta y entró. Mientras recorría la pared para encontrar una salida, Joshua luchó por acostumbrarse a la oscuridad.
'Después de un tiempo, una vez que te acostumbres a la oscuridad, podrás ver las cosas poco a poco'.
Recordó las palabras que le dijo un niño sobre no cerrar los ojos incluso en las penumbras.
Quizás por las características de su familia, estaba más acostumbrado a la oscuridad que nadie.
"¿Esto es así?"
Joshua abrió el dispositivo de apertura de la puerta en orden y saltó. Había un gran árbol al lado de la habitación de Levenna, y Joshua comenzó a trepar.
"Ha pasado un tiempo desde que hice esto".
Tan pronto como estuvo a cierta altura con la habitación de Ravea, Joshua saltó sin dudarlo. Agarró el marco de seguridad de la ventana con una mano y se colgó de él, y con la otra golpeó la ventana tres veces, descansó un rato y luego golpeó dos veces. Inmediatamente después de que se abrió la ventana, la mujer de cabello escarlata inclinó la cabeza y lo miró colgado.
"Hola".
“¿Qué estás haciendo? ¿No tienes miedo de morir?”
“Para tu desgracia, incluso si caigo desde el segundo piso, no moriré".
“No me refería a eso. Mi padre dijo que te mataría si hacías esto una vez más".
“Está bien mientras no me atrape. Por favor, da un paso atrás por un momento".
Cuando Ravea se apartó de la ventana, Joshua pateó la pared y aprovechó un rebote para entrar en su habitación. Junto a la cama, se colocó sobre el caballete un cuadro sin terminar. Joshua no sabía que Ravea se dormía mirando el cuadro todas las noches.
“¿Deberíamos casarnos?”
“¿Por qué de repente me lo propones ahora? Ya he visto cada parte de ti".
“No, este año… Ya se ha ido incluso la próxima primavera. Estamos listos de todas formas".
“Dijiste que lo haríamos cuando terminarás el trabajo".
“… De repente quería casarme contigo".
“¿Comiste algo echado a perder?”
“Quiero mostrarle a Ian cómo vivimos”.
"... ¿Qué pasó en la fiesta?"
“El Conde Erten llegó a la capital. Apareció como el protagonista masculino de un cuento y se llevó a la condesa".
"Entonces, ¿es por eso que tocaste la ventana en medio de la noche como el protagonista masculino de la historia?"
"Sí".
"No quiero".
“…”
“Haz lo que prometiste. Termina el trabajo y casémonos".
"Sabía que responderías así".
“Si ya sabías, ¿por qué preguntaste?”
"Sólo..."
Mientras Joshua vacilaba, Ravea resopló y colgó un lienzo nuevo en el caballete vacío. Luego recogió carbón.
"¿Qué vas a hacer?"
“Quítatelo".
"¿Qué?"
"De repente quiero dibujar".
"¿Por qué tengo que quitármelo?”
“Si es posible, es mejor comenzar pintándote desnudo".
Joshua gruñó y suavemente se quitó la ropa. Evitando la mirada de Ravea observando de cerca sus abdominales, Joshua miró por la ventana.
‘¿Vine aquí por nada?’
***
“Bel".
"No digas nada".
"¿Estás enojada?”
"¡No digas nada! Ni siquiera me mires. Ni siquiera respires".
Él aceptó y bajó la cabeza. El talismán que entró en la etapa final se completó con un poco más de tejido.
‘Me alegro de que Beatrice me haya enseñado cómo terminarlo por adelantado.’
Escuché que este amuleto está tejido con anhelo. Por eso, estaba tratando desesperadamente de no mirar a Ian y hacerlo con dedicacion. Cuando estaba a punto de terminar, escuché el suspiro de Ian como si el suelo estuviera a punto de explotar.
"Te dije que no respiraras".
"¿Estás tan enojada que ni siquiera quieres escuchar mi respiración?"
"Ya está hecho. Terminé de hacerlo".
Puse el talismán sobre su mano. Ian recogió el talismán y me miró con ojos preguntándome qué era esto.
"Es un talismán. Está hecho de anhelo y protege al dueño".
“...”
“Entonces, ni siquiera pienses en salvarme. Si pasa algo, huye conmigo.
“¿Bel?”
Toqué su máscara como si estuviera acariciando su mejilla. Si yo quisiera, podía quitarle la máscara, aun así, él no se movió.
“Tengo demasiadas historias que contarte”.
“…”
“Dije antes que necesitabas tiempo. ¿Necesitas más tiempo? ¿Tienes el coraje de escuchar y aceptar mi pasado?”
“Eres tú, no yo, quien necesitaba tiempo”.
“…”
"Me negué porque no quería escuchar por un impulso tu pasado de mala forma, no quería que fuera por un impulso".
“Tú…”
Ian sonrió brillantemente. Entonces tomó mi mano.
"Me alegro de que el tiempo que estuve lejos de ti se haya convertido en el momento de tener coraje".
"¿Cómo lo sabes tan bien?"
"¿Eh?"
"¿Cómo puedes conocer mi corazón tan bien que ni siquiera yo lo sabía?"
“Porque mi esposa y yo nos parecemos. Podía entender los sentimientos de ocultar algo, de querer decir algo y de no poder hacerlo”.
“…”
"Por supuesto, lo supe solo después de conocer a mi esposa. Desearía que esperaras un poco más para quitarme la máscara".
"¿Puedo atacarte?"
"¿Eh?"
"Ahora, ¿puedo atacarte?"
"…¿En qué sentido?"
"En ese sentido".
A través de las cuencas de los ojos de la máscara, se podían ver los ojos desconcertados de Ian temblando. Anteriormente, había mencionado esta historia para burlarme de él, pero ahora era pura sinceridad. Después de todo, ni él ni yo teníamos un lugar al que escapar.
“Primero que nada, estamos en un carruaje…”
"A quién le importa".
“N-no tengo intención de quitarme la máscara".
“Está bien".
Apartando la mirada ante mi respuesta, luego me miró. Puse una sonrisa en mis ojos como para confirmar la pregunta.
"Está bien. No importa ahora".
"¡Me importa! …. Así que por favor espera un poco más".
“Me parece bien".
Solté su mano y me encogí de hombros. Tan pronto como la distancia entre él y yo se amplió, suspiró aliviado.
“No vas a dejarme en paz solo porque sí".
“Gracias a ti, esperar se ha convertido en mi especialidad".
Sonrió torpemente ante mis palabras contundentes.
Observé la escena en silencio y, por un momento, recordé la situación que había olvidado.
"¿Pero por qué estás aquí?"
“¿Qué?”
“¡Eh, tú! Si vienes a la capital en este momento, todos mis planes no tendrán sentido. ¡Me he esforzado tanto para ganar tiempo!”
"Eh… ¿Por Zoran?”
"¡Por supuesto! Oh, estoy condenada. Deberías haberme dicho antes. Si lo hubieras hecho, habría hecho otros planes o te habría escondido. Tengo que ganar más tiempo antes de que el chisme llegué a la capital. ¿Qué tengo que hacer? ¿Qué tengo que hacer?"
“… Bueno, ¿qué debo hacer?”
“No, en primer lugar, ¿cómo puedes aparecer en una fiesta como esa en primer lugar? No tenías invitación".
“Entrar fue tan fácil como tener una. Solo basta con pedirle al sirviente que no haga un escándalo".
"Oh mi..."
Sabía todo acerca de mi plan desde el principio y estaba detrás de él. Era como jugar un juego con él. Reprimí mi estómago hinchado y le pregunté.
"Si sabías todo, ¿cómo asumirías la responsabilidad de esta situación?"
"No te preocupes. En primer lugar, me dispuse a llegar a la capital al mismo tiempo que el duque de Turba".
"¿Qué dijiste?"
“Es importante no solo obtener información, sino también transmitirla. Si vas por la ruta que conoce Erten, se puede acortar la distancia un par de días… ¡Ay!”
"¿Sabías todo, planeaste todo y luego te burlaste de mí?"
“¿E-esposa?”
"Ha pasado mucho tiempo desde que tuvimos una reunión conmovedora, pero cada uno usará sus propias habitaciones a partir de hoy".
“¿Qué? Pero…”
“Ahora que lo pienso, ¿no crees que estás muy callado a pesar de haber sido regañado? Si estás tranquilo, ¿no es mejor que duermas como mi compañero?”
***
Miré hacia la puerta con Ku en mis brazos. Tan pronto como regresé a la mansión, Ku puso su cola cerca y corrió alrededor de mí y frotó su cabeza contra mi pierna. Fue agradable ver a Ku después de mucho tiempo, pero no tuve más remedio que estar realmente enojado por traer a Ku a la capital. Ian parecía no tener intención de entrar a pesar de que había pasado mucho tiempo desde que había entrado en la habitación.
Ku se quedó en mis brazos por un rato, luego se acurrucó junto a mi almohada. Parecía ser más tímido que de costumbre porque había llegado a un nuevo lugar.
‘De todos modos, ese tipo es realmente... ¿Por qué lo trajiste hasta aquí?’
Al final, cansado de esperar, también me acosté en la cama y cerré los ojos. Sentí que me quedaría dormido fácilmente por todo el trabajo que tuve hoy.
‘Iba a decírtelo de inmediato cuando nos encontráramos’.
De hecho, no había nada por lo que enojarme hasta que vi a Ku. Después de todo, pensé lo mismo que él y traté de hacer lo mismo. Sin embargo, varias circunstancias se superpusieron y, al final, terminé enojándome con él.
'Ugh, si tan solo no hubiera traído a Ku’.
Entonces Ku, que estaba durmiendo, se despertó. Los ojos de Ku brillaron en la oscuridad. Cuando los ojos de Ku parpadearon lentamente y luego se cerraron de nuevo, la tensión que había estado aguantando durante tanto tiempo se liberó, haciendo que mis ojos se cerraran lentamente.
“Hermana, haz una corona conmigo".
“¡No te vayas! Juega conmigo, hermana".
Rael y Luci tiraban cada uno de mis brazos. Miré lentamente. Mi madre y Hyrpen estaban sentados a la sombra del árbol. Mi madre sonreía y Hyrpen, como siempre, estaba leyendo un libro apoyado contra ella con el rostro inexpresivo.
‘Es un sueño’.
No era una pesadilla del pasado, pero era un sueño que no quería tener. Sonreí y le dije a Rael y Luci.
“Si los tres no podemos jugar, yo no jugaré”.
Ante mi respuesta, los dos se miraron con rostros insatisfechos. Entonces empezaron a hablar sobre con qué jugar. Me acerqué a mi madre y a Hyrpen.
“Siempre hay muchos problemas entre ustedes dos, Bel. En serio, es porque él te quiere mucho".
"Está bien, madre".
“No tenías que dar una respuesta tan madura. Hyrpen, ahora ve y juega con ellos. Van a pelear de nuevo. Sugiere una forma para que jueguen los cuatro".
Hyrpen cerró el libro y se acercó a Rael y Luce. Lo miré y le pregunté a mi madre.
“No hay forma de que los cuatro podamos jugar”.
"¿Sí?"
“Los cuatro nunca jugamos”.
“… Te pedí que no odiaras a Hyrpen".
“No puedo evitar odiarlo”.
‘Espero que no odies a Hyl. Él también sufre a su manera. No peleen entre hermanos y… Protege a Rael.’
No pude evitar odiarlo. Lo único que pude preservar, fue reconocer que ambos somos hermanos.
‘He vuelto a mis sentidos, es un alivio.’
'Tu madre murió así, ¿no tienes algún remordimiento?' (Esto se lo dijo Morigan a Bel)
‘… ¿Quién es?’ (Esto lo pensó Bel.)
“No juegues demasiado con la gente, Morigan". (Esto lo dice Bel.)
En un instante, el cabello rubio de mi madre cambió a canas. Las tres personas a lo lejos se convirtieron en cuervos y se dispersaron.
"Hice que tuvieras un buen sueño porque pareces tener pesadillas en estos días. ¿Por qué te enojas?”
“Porque no tiene ningún sentido. Solo una pesadilla me haría recordar esa época. ¿Qué significa este sueño?"
La diosa me miró con ojos lastimosos. De repente, mi cuerpo había vuelto a su estado original, ya no era el de un niño.
"De todos modos, ni siquiera puedes olvidar el pasado, solo lo recuerdas. ¿No es doloroso?”
"Por supuesto que no lo recuerdo todo. Aun si lo hiciera, recordar no significa que puedas sentir las emociones que sentiste en ese momento".
"Pensé que eras inteligente, pero eres más tonta de lo que pensaba. ¿No recuerdas todo lo que dijo tu madre? Entonces ¿por qué estás tan obsesionada con la venganza?"
“No es por mi madre. Sino por mí".
“… Bueno, tus sentimientos personales no son asunto mío, así que no me entrometeré más”.
"Muchas gracias".
“…”
“La guerra que quieres no va a suceder”.
“¿No sabes? No soy un dios que hace guerras, soy un dios que acaba con las guerras”.
“… ¿Qué?"
“No puedo decirte más que esto debido al contrato. Solo vine a verte por última vez”.
"¿Última vez?"
"Tengo que volver a Tyrannag ahora. Oh, no te preocupes por eso, me quedaré con el cuervo hasta que termines tu contrato".
“...”
“Estás tratando de mantener la palabra de tu madre, ¿verdad? En lugar de soñar así, piensa en lo que más quería tu madre y lo que es más importante para ti. Apóyate con tus recuerdos”.
La voz de la diosa era diferente del sonido turbio y revestido de hierro que había escuchado alguna vez. La diosa sonrió.
“¡Morigan!”
Salté de mi asiento, gritando su nombre. A diferencia del lugar brillante, todo estaba oscuro alrededor. Cuando miré el asiento a mi lado, Ku no estaba allí.
'¿Qué es lo más importante para mí?’
***
Ian se despertó por la sensación de presión en su pecho. En medio de la noche, Ku rascó la puerta para abrirla, dejándola abierta y durmiendo. Es por lo que no prestó atención a lo que estaba pasando. De todos modos, las sombras, que son las mejores personas detectando presencias, estaban haciendo guardia.
'No creo que sea Ku...’
Algo que no es un gato entró a su habitación y a las sombras no les importó. Solo había una persona capaz de hacer eso. Ian buscó a tientas la máscara. Cubriéndose la cara con una máscara, abrió suavemente los ojos. Como era de esperar, era Belita.
“¿Bel?”
"¿Por qué querías dejarme sola?"
Ian se dio cuenta de lo que estaba hablando Bel. Estaba hablando de lo que había preparado para salvarla en caso de ser necesario.
"Quería que huyeras, quería que te fueras y sobrevivieras".
"Ya no quiero sobrevivir sola".
“…”
“Sobrevivir sola es lo mismo que morir sola. Eso es lo que pienso".
… ¿Qué significa eso?"
“Yo también tengo una manera de salvarte en caso de que algo suceda. Si se revela la traición, seremos arrestados por traición al planear un motín. Le haré pensar a todos que solo te estaba utilizando".
“… Bel".
“Por supuesto que renuncié a esa idea. Me di cuenta de que solo estaba pensando en mí, no en ti".
“…”
“Vine a la capital para proteger a Rael y a ti, mis seres queridos… Al final, me di cuenta de lo asustada que estaba. Yo... No quería que me dejaran sola otra vez, así que no quería sobrevivir sola, es por lo que traté de abandonarte con la excusa de protegerte. No merezco regañarte. Hice lo mismo".
La ropa de Ian estaba mojada. Belita seguía escondiendo su rostro en su pecho para ocultar el llanto. Ian se levantó y apartó la cara de Belita.
“Pensé que era inteligente y fuerte por haber reído frente a mi padre y superar todos esos momentos asquerosos. Pero no fue así. No entendí el significado de la última petición de mi madre. Porque no quiero vivir sola… Así que pospongo la felicidad al final. Cuando todo terminó y pueda perdonarme a mí misma, pensé que podría ser feliz si aún pudiera estar a tu lado en ese momento”.
“…”
“Pero no es así. No era que tuviera que poner fin a mi venganza y protegerte a ti y a Rael para volverme feliz, si no que tengo que ponerle fin para protegerlos. Lo siento. Pensé que nunca regresaría. No quiero dejarte solo".
“Bel-lita…”
Ian no podía abrazarla ni apartarla, apenas y podía llamarlo por su nombre con voz rígida. Cuando escuchó su nombre, levantó la cabeza y sonrió mientras lloraba.
“Y-yo…”
Al darse cuenta de que Ian estaba aterrorizado, Belita gritó su nombre y levantó la mano. Ian volvió la cabeza para evitar su contacto.
"¿Qué te pasa, Ian?"
“Si dices eso, lo siento mucho…”
“Por supuesto que debería arrepentirme. Intentaste dejarme sola".
“No es eso, Bel…”
Ian hizo contacto visual con Belita, quien lo miraba preocupada, y cerró la boca, diciendo que estaba divagando. Él agarró su mano con manos temblorosas y la llevó a la cama.
"Tengo mucho que disculparme contigo".
"¿Ian?"
"Traté de dejarte sola, por supuesto que estuvo mal. Sin embargo, lo que realmente hice mal es que yo…”
Ian, que hablaba con calma, finalmente no pudo decir lo más importante y se asfixió.
“Ian, dilo".
“…”
“Dime lo que tanto te atormenta".
"Soy yo".
"¿Ian?"
“Quería tenerte a mi lado. Tenía miedo de que me abandonarás, tenía miedo de que dijeras que es terrible ser mi esposa, tenía miedo de matarte. Quería que fuera imposible para ti apartarse de mi lado y abandonarme”.
“…”
"Pero cuando sentí que realmente podrías morir, no pude soportarlo. Por eso te envié a la capital. Porque si te quedas conmigo, no sabes lo que pasará. Porque no quiero perderte".
“…. Ah".
“Lo siento. Tuve un pensamiento tan terrible…”
"Eso debió ser realmente molesto".
“… Sí".
"Entonces, ¿por qué viniste a la capital?"
“Después de todo, no soporto no estar contigo, lo siento".
"Oh, no tienes que disculparte por eso".
"¿Eh?"
"Tú, ¿me amas?"
“… Amor".
“Contéstame con seguridad. ¿Me amas?"
“¿A esto se le puede llamar amor?”
***
Ian volvió la cabeza para evitar su mirada. Al verlo así, Belita recordó su conversación con Beatrice. Después de un momento de silencio, sonrió como si no pudiera evitarlo e hizo otra pregunta.
"Está bien, ¿entonces te gusto?"
Ante esa pregunta, Ian asintió con entusiasmo. Belita sonrió contenta y tomó su mano. Sus manos, que eran más fuertes que de costumbre, estaban firmes.
"Tú también me gustas. No eres el único que pensó eso. Porque también pensé innumerables veces que quería tenerte a mi lado por la fuerza. No sé si podemos llamar esto ‘amor’. Pero, estaré a tu lado. Haré todo lo posible para ser feliz contigo. Durante el tiempo que estuve lejos de ti, conocí mi corazón. Incluso si tratas de separarme, incluso si me dices que corra, nunca lo haré”.
“Bel…”
"No quiero volver a sobrevivir sola. Tampoco quiero dejarte solo. Porque sé lo terrible que es. Así que te lo contaré todo. En realidad, iba a decirlo tan pronto como nos conociéramos, pero terminé peleando por nada”.
Belita se frotó la cara y se secó todas las lágrimas. Entonces, se encendió la vela. Aún quedaban marcas de lágrimas en su mejilla.
“¿Recuerdas que dije que el Vizconde Zoran cometió un gran error? Eso es porque permitió que mi madre y hermana murieran. Hace trece años hubo una gran epidemia, él nos abandonó, y no tuvimos más remedio que morir en aislamiento”.
“…”
“Nos envió medicamentos para curar la peste, pero solo era una dosis. No había ninguna enfermera, y la comida y el agua no se daban adecuadamente. Mi madre me eligió a mí sobre mi hermana, ya que era más probable que yo viviera debido a mi condición. Yo era un poco mayor y un poco más fuerte".
Ante su voz tranquila, Ian sintió un dolor punzante en el pecho. Ian sabía bien lo difícil que es hablar sobre el pasado doloroso.
“Me obligó a tragarme las pastillas y comer la poca comida que nos quedaba para sobrevivir. Cuando la plaga se calmó y la puerta se abrió, les rogué para que salvaran a mi madre y a Luci. Pero no había más medicina. El Vizconde las había vendido todas".
“¿Vendido?”
“Incluso si estaba prohibido en ese momento, al final hubo muchas transacciones detrás de escena. Vendió la droga que podría haber salvado a mi madre y a Luci. Más tarde descubrí que solo habían quedado dos medicamentos, uno para el Vizconde Zoran y otro para su hijo mayor, Hypen. Al final, eran simples vidas que podía desechar sin importancia”.
“Ese hijo de…”
"Al final, mi madre y Luci ni siquiera pudieron tener un funeral decente y fueron quemadas con otras personas enfermas. Tal vez fue una estrategia. Las demás esposas y jóvenes que murieron después fueron quemados para evitar la propagación de la enfermedad".
“…”
“Fui la única que sobrevivió…, Fingí ser una hija obediente frente al Vizconde. Fue la única forma de vivir. No podía perdonarme el haber sonreído frente a él. ¿Qué tan terrible soy para poder reírme casualmente?”
“Belita".
“Te lo dije. No creo que la fealdad de las personas pueda verse por la apariencia. A mis ojos, mi padre, que es capaz de matar a su esposa e hijos, las personas que te abandonaron, los que te critican por tus cicatrices, y yo, que sonrió, somos los más feos".
“No".
“…”
“Eso no es verdad, no es cierto. No es tu culpa".
“Incluso si no es mi culpa. Está mal para mí".
“…”
“Se siente mal. Creo que es terrible para mí poder reírme a pesar de todo. Esto no se va a arreglar fácilmente”.
“Belita”.
“Llámame Bel. Me gusta más".
“Esposa".
Ante el apodo de esposa, Belita sonrió brillantemente. Una sola lágrima fluyó de entre sus ojos entrecerrados.
"Esa es la mejor manera de llamarme".
“…”
“Ian, tengo algo que decir. Dijiste que querías tenerme a tu lado, ¿verdad?"
“… Sí".
“¿Crees que es incorrecto?”
“Es solo que yo…”
"¿Crees que pensaré que eres terrible? ¿Crees que te abandonaré? Más bien, tú eres el que está huyendo de mí…”
Belita agarró la mejilla de Ian y lo hizo mirarla directamente a los ojos. Mirándola a los ojos, se dio cuenta que Belita quería regañarlo.
"Acabo de contarte todo sobre mi pasado. Incluso te dije mis más terribles pensamientos. ¿Pero todavía me veo así en tus ojos?"
“Nunca te he visto así. Sin embargo, a veces es inevitable quedar atrapado en el miedo a ser abandonado. No puedo dejar de pensar cuando un amigo, en el que confié mucho, cambió repentinamente tan pronto como vio mi rostro".
“… Sí, eres igual que yo. Tu problema tampoco se arreglará fácilmente. Pero ¿puedes prometerme una cosa?”
“¿Prometer?”
“Intentemos arreglarlo juntos. Prometimos contarnos todo sin secretos y trabajar duro para ser felices juntos".
“… Sí".
“Y cuando los dos estemos juntos en el futuro, hablemos tan cómodamente como lo hacemos ahora. Como un amigo. Me gusta como somos ahora".
“Entonces a mí también, Bel".
“Sí, bueno. Eso no me gusta".
Ian se calló ante la firme respuesta. Bel se rió y le acarició la cabeza.
“Si no te quitas la máscara, lo haré incluso si no te gusta”.
Ian, que estaba recibiendo su mano en silencio, la abrazó. Y luego se acostó. Ku despertó de su sueño y los estaba observando a los dos.
“Bueno, me gustaría agregar una cosa".
"¿Eh?"
"Venganza, hagámoslo juntos".
“…”
“Vamos a vengarnos juntos".
“… Bueno".
***
“Miau”.
‘No puedo abrir los ojos’.
Probablemente porque me quedé dormida justo después de llorar mucho. Sentí a Ku caminando alrededor de nuestra cama.
'Oh, me quedé dormida encima de Ian. ¿No soy muy pesada?’
Levanté mi cuerpo después de soltar su brazo alrededor de mi cintura. Ku rápidamente se interpuso entre nosotros y frotó su rostro contra el mío.
“Ku, no pongas tu cola en la cara de Ian".
“Miau, miau".
"Ni siquiera muevas la cola".
Ku movió su cola a modo de juego sobre los labios de Ian. No pude dejar de reír cuando lo vi cerrar la boca. Finalmente puse a Ku en mis brazos y acomodé la torcida máscara de Ian. Ku estaba haciendo ruidos agudos de una manera agradable.
"Después de todo, no pude decirlo al final".
‘No creo que quisiera oírlo. Creo que su respuesta no es que me ama, sino que le gusto’.
"Tonto".
‘Esta persona me ama, solo que no lo sabe, Beatrice’.
“¿Por qué soy un tonto?”
"Porque estoy fingiendo dormir con una cara tonta".
“…”
“¿No habías dicho que querías decirme algo”.
“¿Quieres escucharlo?”
“Decidimos no ocultarnos secretos".
“… Vamos a desayunar primero. Creo que Ku también tiene hambre. Te lo diré mientras comemos".
“Está bien".
“… Ian, ¿hay alguna sombra a nuestro alrededor?”
"Desde anoche. ¿Tienes miedo de que hayan escuchado nuestra conversación de ayer?"
"No, es por la historia que tengo que contarte. Retira a todos los sirvientes y sombras mientras comemos. ‘Ku es el único que puede escucharlo’".
“Si es una historia peligrosa, está bien que las sombras la escuchen".
“No solo es peligroso, sino que también es una historia terrible. No es una cuestión de lealtad, es un problema que no tiene nada de bueno saberlo”.
"Está bien. Hagámoslo".
“Bueno. No hagamos eso".
“Entonces vamos a desayunar. Ku me sigue insistiendo”.
“Miau".
Ian no respondió, pero me miró como si estuviera loca. Incliné la cabeza y llamé su nombre.
"¿Ian?"
“…”
“Ian".
Al no haber respuesta, agarré las patas delanteras de Ku y las puse en su cara. Quizás sorprendido por la suave sensación, amplió más la distancia.
“Cálmate. ¿Por qué estás tan pensativo?”
"No es nada".
"No creo que sea nada".
“… Es solo que te ves muy bonita".
Sonreí brillantemente ante su respuesta. Cuando me reía, él se reía.
“Debes haberte torcido los ojos".
“¿Eh?”
“Iré a refrescar mi cara hinchada, mientras tanto, tú ve a checarte los ojos. Nos vemos para desayunar".
Le entregué a Ku a Ian y salí de su habitación. No sabía si era porque mi cara estaba hinchada, o si era solo porque estaba avergonzada.
‘Necesito refrescarme la cara. ¿Cómo pude decir eso?’
La palabra bonita no era desagradable. Más bien, mi corazón latía con fuerza.
"¿Señora? ¿Qué está haciendo ahí?"
"¿Eh?"
"Oh, vaya. ¿Cómo puede vestir así? Va a coger un resfriado. Dese prisa y entre en la habitación".
Lina me empujó hacia mi dormitorio. Lina vio mi cara hinchada y mojó una toalla en agua fría.
"Oh, voy a desayunar abajo, así que no es necesario que me lo traigan".
"Sí. Más bien, señora, debe haber dormido bien hoy. Se ve feliz".
“… ¿En serio?”
"Sí. Después de todo, ¿fue bueno que viniera el Señor?”
“… Así es".
Lina sonrió como si lo supiera y me alisó el pelo. Después de que la hinchazón disminuyó un poco, pude verme correctamente en el espejo. En el espejo, como siempre, los ojos azules fueron lo primero que vi.
'Como era de esperar, no se arreglará fácilmente'.
Dejar de superponer al Vizconde cada vez que miro mis ojos. Cerré los ojos con fuerza y los abrí. Cuando revisé mi rostro nuevamente, el rostro de mi madre parecía estar ligeramente superpuesto.
'Ser feliz'.
Lo que más quería mi madre era que yo fuera feliz.

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