Capítulo 8: La Espada Sagrada Termore - Parte 12



 

“Exactamente”.

 

Yelena se quedó sin habla.

‘¿No es un completo idiota?’

Sabía muy bien que el Príncipe Heredero no era un ser humano decente porque ella misma lo había experimentado, pero no sabía que sería tan bajo.

Fue una conmoción y un horror.

Con el tiempo, Yelena sintió lástima.

No era compasión por él.

‘Pensar que un tipo así se convertiría más tarde en rey...’

¿Ese país estaba realmente bien?

¿Por qué ella nació como una ciudadana más del reino?

Yelena, que se compadecía de sí misma, suspiró.

Estaba molesta.

‘Como es miembro de la familia real, no se puede hacer nada al respecto’.

La razón por la que Cydrion pudo actuar de acuerdo con su temperamento incluso frente a la familia real fue porque la Torre Negra era una organización independiente.

La Torre Negra solo tenía una relación de cooperación con la capital, pero no tenían posición para obedecerlos.

El caso fue diferente con Yelena y Kaywhin, quienes estaban subordinadas al reino.

‘Debería haber ocurrido un accidente en las montañas’.

Dado que estaba en medio de una situación agitada, podría haberlo golpeado la nuca en secreto.

La expresión de Ben de repente apareció en los ojos de Yelena, mientras se arrepentía tardíamente.

Tal vez por la edad, normalmente no tenía buen color, pero hoy estaba aún más pálido debido al Príncipe Heredero.

Yelena miró el rostro del mayordomo con tristeza antes de abrir repentinamente la boca.

 

“Ben, ¿puedo contarte una historia graciosa?”

“¿Una historia graciosa?”

“Esto sucedió antes de que se desenterrara la espada sagrada…”

 

Le contó a Ben de la manera más realista posible y en detalle la historia de cómo compitió con el Príncipe Heredero por el derecho a excavar la espada sagrada en el Condado Morgana y ganó.

En particular, como el Príncipe Heredero se quitó el abrigo y ridículamente corrió hacia las llamas, lo cual fue enfatizado y mencionado dos veces.

 

“¡Ja ja! ¡Eso es francamente increíble! ¡Debería haberlos visto a todos en el acto, ja ja!”

 

El rostro de Ben se sonrojó y se echó a reír como si estuviera aliviado.

Yelena se alegró de ver el rostro sonrosado y arrugado del mayordomo.

Fue un tiempo alegre.

 

***

 

Andyden flotaba en el aire como si volara en el cielo.

¿Cuánto tiempo había estado moviéndose así?

Encontró algo en el suelo y abrió la boca.

 

“Sylphy, espera”.

 

Pronto, su cuerpo descendió lentamente desde el aire hasta el suelo.

Un hombre estaba de pie frente a Andyden, que había aterrizado en el suelo.

 

“Hola, Andyden”.

“¿Cómo supiste que estaba pasando por aquí?”

“Ya sabes. a menudo puedo ver una poco hacia el futuro”.

“Me viste con esa habilidad. De todos modos, es una habilidad increíble cada vez que la escucho”.

“Está sobrevalorado. A mis ojos, tu magia espiritual es mejor”.

 

El hombre con el pelo largo que le llegaba por debajo de los hombros recogido le sonreía.

El cabello del hombre era castaño oscuro, pero dependiendo de la presencia o ausencia de luz, se veía castaño o negro.

La figura de Andyden se reflejaba en sus ojos gris plateado.

 

“Por cierto, ¿fue útil la información que te di?”

“Ah, eso”.

 

Andyden arrugó una ceja y se rascó la nuca.

 

“La información se filtró”.

“… ¿Qué?”

“El Príncipe Heredero lo sabía. No sé cómo”.

“Parece haber una rata cegada por el dinero entre los informantes”.

 

El hombre murmuró con los ojos hundidos.

Se filtró información que se mantuvo en secreto.

Se trataba de alguien debajo de él que vendía información para satisfacer su interés personal.

 

“Gracias Andyden. Gracias a ti, descubrí que el gremio necesita ser organizado”.

“Qué”.

“Estoy avergonzado. Esa era la información que dije que solo seria para ti...”

“Está bien. Porque obtuve la espada sagrada de todos modos”.

“¿Qué?”

“Aunque mi amigo se la quedó, yo no”.

 

Habiendo dicho eso, Andyden se quedó en silencio por un momento antes de abrir la boca.

 

“He visto cosas extraordinarias…”

 

Lo que vino a la mente de Andyden no fue otra cosa que lo que había sucedido durante la excavación de la espada sagrada con Kaywhin.

 

‘Si cruzan la línea que marcamos, la barrera se activará a partir de ese momento. Voy a esperar aquí’.

 

El cochero del Conde, que llevó a Kaywhin y Andyden al bosque donde se encontraba la espada sagrada, detuvo el carruaje y así lo dijo.

Los dos se bajaron del carruaje y caminaron directamente hacia la barrera.

Cuando entraron en la barrera, de repente se formó una niebla a su alrededor.

Y a lo lejos, vieron una espada enterrada en el suelo, dejando solo el mango.

 

‘Esa es la espada sagrada...’

 

Cuanto más se acercaban a la espada, más espesa era la niebla.

Después de eso, llegó hasta el punto en que ni siquiera podía ver un paso adelante.

 

‘Espere, Su Excelencia-’

 

Kaywhin caminó a través de la niebla y sacó la espada sagrada de inmediato.

La espada salió más fácil de lo que pensaba.

Sin embargo, el problema ocurrió después de eso.

 

(¡Krrr!)

(¡Kaak!)

 

‘… ¿Demonios?’

 

Una gran cantidad de demonios apareció de la nada y rodearon a Kaywhin y Andyden en un instante.

Era como si la barrera le dijera que tenían que lidiar con todos esos demonios antes de poder llevarse la espada sagrada.

Los demonios eran reales, no una alucinación o una ilusión.

Andyden se enteró de eso cuando la sangre verde del demonio que mato Kaywhin salpicó todo el piso.

 

(Puaj).

 

Andyden frunció el ceño.

El hedor era asqueroso.

Y a partir de ese momento, Kaywhin dejó la espada en su cintura y comenzó a luchar contra los demonios con sus propias manos.

 

“… Y pensar que viviría para ver los cuellos de los demonios rotos por el agarre humano”.

“¿Qué?”

“No”.

 

Kaywhin derrotó hábilmente a los demonios con sus propias manos, pero debido a que había tantos demonios, no había más remedio que limitarse a lidiar con ellos.

Al final, los últimos fueron cortados con una espada.

Andyden se preguntó por qué Kaywhin hizo algo tan ineficiente y loco, pero supo la razón solo después de regresar al castillo del Conde.

El propósito era evitar en lo posible manchar la ropa.

No quería que Yelena oliera el hedor.

‘Como era de esperar, en muchos sentidos, no es en absoluto un ser humano ordinario’.

Andyden negó con la cabeza e inmediatamente miró al otro hombre.

 

“Oh, ahora que lo pienso, dijiste que participarías en una guerra contra los bárbaros”.

“Ah, eso”.

“¿Lo dices en serio? Sera peligroso”

“Tengo que hacerlo de todos modos. Solo haciendo eso... el castillo real me permitirá cambiar mi apellido”.

“Dijiste que cambiarías tu apellido al de tu difunta madre, ¿verdad?”

“Sí”.

 

Respondió el hombre, encontrándose con la mirada de Andyden con determinación.

 

“Mi vida como Dean Tracys ha terminado”.

“…”

“Por el resto de mi vida, quiero vivir como Dean Milisto”.

“Bueno… debes tener muchos problemas con el desgraciado padre que tienes”.

 

Andyden chasqueó la lengua.

Había oído muy bien lo cabrón que era el padre del hombre, el Vizconde Tracys.

El hombre, Dean, odiaba a su padre y luchaba por salir de su sombra.

 

“Entre las personas que tomaron la prueba de la torre conmigo, no había nadie sin una historia... pero por alguna razón, tú, Dean, eres el único al que animé”.

“Recibí ese apoyo, gracias”.

 

Andyden miró a Dean.

Pronto se acarició la barbilla como si estuviera triste.

 

“Ojalá tuviera una hermana menor o una hermana mayor”.

“¿Qué?”

“Entonces habría arreglado un matrimonio contigo. Por supuesto, seria después de que regresaras sano y salvo de la guerra contra los bárbaros”.

“Jaja, en tus ojos, soy un buen novio, ¿verdad? No es un mal cumplido”.

“Debes casarte con una buena mujer como tú. Llámame en tu boda”.

“Bien”.

“Dime si quieres tirar un ramo. Lo aceptaré. Aunque no sé si el novio puede tirarlo o no”.

“¿Qué?”

 

En lugar de responder a Andyden, retrocedió unos pasos y agitó la mano.

 

“De todos modos, ya que nos despedimos, me voy. Nos vemos la próxima vez si tenemos la oportunidad”.

“Andyden”.

“¿Qué?”

“Cuando subiste a la torre conmigo… dijiste que había una persona a la que querías devolver el favor volviéndote tan fuerte como quería”.

“…”

“¿Cómo fue eso? ¿Devolviste el favor?”

 

Andyden se rió de Dean.

Era una sonrisa que parecía aliviada y algo suave.

 

“Bueno, más o menos”.

 

***

 

Espada sagrada Termore.

Según los registros, se sabía que esa espada fue utilizada por Remeteo I, el fundador del Reino, hace unos mil años.

Se decía que Remeteo usó la espada sagrada para expulsar a cierto enemigo malvado que la humanidad no pudo vencer.

‘Desafortunadamente, no quedan registros ni evidencia sobre el ‘enemigo malvado’ que expulsó, por lo que solo se considera una leyenda...’

El Reino fundado por Remeteo I llegó a su fin después de más de cien años.

Estallaron disputas territoriales y finalmente se dividieron en varios reinos.

Los estudiosos han determinado que la mayoría de los registros de la espada sagrada y otras reliquias se perdieron en el proceso.

Mientras pensaba en la espada sagrada, Yelena de repente levantó la mirada.

En primer lugar, vio la nariz esbelta, la frente recta y los labios bien cerrados de su marido dormido.

La mirada de Yelena bajó un poco.

Más allá del escote de la camisa ligeramente abierta, el cuello y el pecho masculinos quedaron a la vista.

‘… Glup’.

 


CRÉDITOS

TRADUCCIÓN: Ciralak

CORRECCIÓN: Daiyu

RAW DONADO: Miranda


Comentarios